El miembro de la Familia Real reconoció que no tenía intención de derrumbar la monarquía.
El príncipe Harry dijo que tenía suficiente material para dos memorias, pero que se contuvo porque no creía que su padre y su hermano lo “perdonarían jamás”.
En una entrevista con el periódico británico The Telegraph publicada el sábado, también dijo que publicar sus memorias no era un intento de “derrumbar la monarquía. Se trata de tratar de salvarlos de sí mismos”.
“Y sé que muchas personas me crucificarán por decir eso”, dijo.
La sincera autobiografía de Harry, Spare, vendió 1,4 millones de copias en inglés el primer día de su publicación. Muchas de sus revelaciones y acusaciones aparecieron en los medios de comunicación de todo el mundo esta semana. En el libro, el hombre de 38 años reveló cómo lo afectó su dolor por la muerte de su madre, la princesa Diana, y vio a Harry detallar su resentimiento por ser el "repuesto del heredero".
“Podrían haber sido dos libros, digámoslo así”, dijo Harry en la entrevista. “Pero han sucedido algunas cosas, especialmente entre mi hermano y yo, y hasta cierto punto entre mi padre y yo, que simplemente no quiero que el mundo sepa. Porque no creo que me lo perdonen nunca”.
Harry también dijo en la entrevista que estaba preocupado por los hijos de William y dijo que sentía “una responsabilidad al saber que de esos tres niños, al menos uno terminará como yo, el repuesto. Y eso duele, eso me preocupa”.
Dijo que se sentía así a pesar de que William le dejó en claro que “sus hijos no son mi responsabilidad”.
El Palacio de Buckingham y el Palacio de Kensington no han comentado sobre el libro de Harry o su serie de entrevistas con los medios para publicitarlo.