Quiñones es parte importante de la historia de Tigres al ser protagonista de los equipos que conquistaron dos Ligas MX.
El Estadio Universitario recibirá a un viejo verdugo, el actual campeón del futbol mexicano en el marco de la segunda fecha del Clausura 2023. Después de empezar el torneo con victoria, los Tigres ven al Pachuca como un “buen equipo para medirse” y ver de qué están hechos esta nueva temporada, ahora bajo el mando de Diego Cocca.
“Era importante encontrar un triunfo en un estadio donde hace mucho no se ganaba. El equipo mostró carácter y actitud para conseguir los tres puntos en este arranque de torneo que nos llena de confianza” aseguró Luis Quiñones en conferencia de prensa previo al partido.
El colombiano, que está en el cuarto año de su segunda etapa como jugador auriazul, fue el autor del último gol en la goleada sobre Santos Laguna en la primera jornada, y tras una temporada con altibajos bajo las órdenes de Miguel Herrera, volvió a convertir después de cinco meses de sequía y su reacción fue ir a abrazar a su nuevo entrenador.
“Algo que siempre he tenido es agradecimiento sobre los técnicos que he tenido. El gol fue importante por la confianza que me dio y el abrazo fue una forma de retribuir su apoyo y deseo de que las cosas me salgan bien” explicó el atacante felino.
Quiñones es parte importante de la historia de Tigres al ser protagonista de los equipos que conquistaron dos Ligas MX y la única Liga de Campeones de CONCACAF que tiene el conjunto universitario en sus vitrinas. Sin embargo, en el último tiempo recibió abucheos por parte de la afición.
“En un club como Tigres, que a lo largo de los últimos años es un equipo tan ganador, la gente te exige más. Yo estoy tranquilo porque he hecho las cosas bien. Los silbidos son momentos o baches y yo trabajo para revertir eso. En lo personal estoy bien, me reencontré con el gol en buen momento, ya que el siguiente partido es contra el campeón y será buen equipo para medirnos” concluyó.