La socialité presumió su bikini body junto a una de sus mejores amigas.
La empresaria Kim Kardashian arrancó suspiros al publicar en Instagram una improvisada sesión de fotos en un sauna, junto a una de sus mejores amigas.
La socialité utilizó un diminuto bikini negro, con un top triangular de escote profundo y tirantes delgados, para lucir sus “curvas de impacto” y su abdomen tonificado.
Kardashian, de 42 años de edad, usó maquillaje en tonos claros para dar una apariencia más natural a su rostro, mientras su cabello lo peinó en un chongo bajo.
Por su parte, su amiga Natalie posó para la selfie con un bikini rojo, a juego con un collar plateado para resaltar su escote.
“No siempre son arcoíris y mariposas, a veces son arcoíris y saunas”, escribió la celebridad estadounidense al publicar las fotografías en Instagram, aunque no reveló si se encontraba en su residencia o en otro sauna.
Kim Kardashian viajó esta semana al pequeño pueblo costero de Crescent City, en California, donde aprovechó para disfrutar de la comida en un restaurante local. La modelo no reveló el motivo de su visita, pero sus fanáticos creen que pudo haber ido a visitar a un preso en la prisión de Pelican Bay.
Mientras se encontraba en el restaurante a la orilla del mar, la socialité estuvo acompañada del equipo de camarógrafos del reality The Kardashians, que se transmite por Hulu.
Durante la primera temporada del programa, Kim admitió que ha utilizado botox en su rostro para el espacio que hay entre sus cejas, pero nunca lo ha usado para rellenar sus labios.
La empresaria contó que su primera inyección de botox la recibió cuando tenía 29 años de edad, pero su piel presentó una reacción desagradable.