El estudio también señaló que estas personas son más propensas a desarrollar enfermedades crónicas.
Un estudio reciente mostró que los adultos que no se hidratan adecuadamente tienen un riesgo mayor ante el desarrollo de enfermedades crónicas y a morir a edad más temprana. Para la investigación, los académicos analizaron la relación entre los índices de sodio en la sangre y varios indicadores de salud.
Como resultado se encontró que las concentraciones más altas podrían indicar que las personas no ingieren los líquidos suficientes, por lo que serían más propensos a desarrollar enfermedades crónicas y mostrar signos de envejecimiento más avanzado.
- Deshidratación se asoció con problemas de salud:
Según la investigación, la deshidratación en personas de mediana edad (40y 60 años) se relacionó con un 39% más de riesgo para el desarrollo de enfermedades crónicas y con un 50% de que la edad biológica fuera mayor a la edad cronológica. Esto último quiere decir que los órganos podrían presentar un envejecimiento mayor al que tienen según su edad.
Cabe mencionar que las enfermedades más recurrentes que se asociaron con una hidratación inadecuada fueron:
- Accidente cerebrovascular
- Enfermedad pulmonar crónica
- Diabetes
- Demencia
- Insuficiencia cardiaca
- ¿Cómo hidratarse adecuadamente?:
De acuerdo con una de las autoras de estudio e investigadora Natalia Dmitrieva, los resultados indicaron que una apropiada hidratación puede lentificar el envejecimiento prolongado y una vida libre de enfermedades.
Estas son las recomendaciones diarias para el consumo de líquidos:
- Mayoría de las mujeres: Entre 6 y 9 vasos de agua (1.5 a 2.2 litros) de fluidos
- Hombres: Entre 8 a 12 vasos (2 a 3 litros)
Dmitrieva señaló que la mayoría de las personas puede incrementar sin inconvenientes su ingesta de líquidos para llegar a los niveles recomendados y que esto puede hacerse tanto con agua como con otros fluidos, por ejemplo, jugos, o verduras y frutas con un alto contenido de agua.
- ¿Cómo identificar que estás deshidratado?:
Explican que la deshidratación se presenta cuando el cuerpo no tiene suficiente agua y líquidos como es necesario, y puede ser leve, moderada o grave. En estos últimos casos se trata de una emergencia que pone en riesgo la vida.
Las causas de la deshidratación pueden variar, pues la pérdida de líquidos puede deberse a la sudoración excesiva por ejercicio o clima cálido, fiebre, vómitos o diarrea, orinar demasiado.
- Para identificar la deshidratación leve o moderada hay que prestar atención a estos síntomas:
- Sed
- Boca seca o pegajosa
- No orinar mucho
- Orina amarilla oscura
- Piel seca y fría
- Dolor de cabeza
- Calambres musculares
- En caso de que se trate de deshidratación grave, las señales que pueden manifestarse son:
- No orinar u orina amarilla muy oscura o de color ámbar
- Piel seca y arrugada
- Irritabilidad o confusión
- Mareos o aturdimiento
- Latidos cardíacos rápidos
- Respiración rápida
- Ojos hundidos
- Apatía
- Shock (flujo sanguíneo insuficiente a través del cuerpo)
- Inconsciencia o delirio
Ante la presencia de síntomas de deshidratación grave, es importante buscar ayuda de inmediato, pues si no se trata puede ocasionar convulsiones, daño cerebral permanente y hasta la muerte en el peor de los escenarios.