Los cambios en la empresa acerera siguen implementándose con el fin de amainar en poco el gasto de recursos y ante la falta de suministros y cortes de servicios por parte de la federación se llevan a cabo estrategias contundentes. Una de ellas es el empleo de gas butano para mantener la temperatura de los hornos en la coquizadora con el fin de que el material refractario no colapse lo que representaría más empleo de dinero. Fuentes allegadas a la empresa señalaron que fueron al menos siete pipas las que ingresaron a la acerera con el fin de abastecer la coquizadora. “Es más tardado, dura hasta 24 horas en mantener la temperatura un horno con el gas Lp pero todo sea para que no se eche a perder el refractario” dijo la fuente. Además trascendió que el departamento de molino Steckel y el normalizado eliminaron los turnos de segunda y tercera quedando solamente el de primera.