El duque de Sussex no pierde la esperanza de retomar el contacto con su hermano.
Las declaraciones que ha hecho el príncipe Harry desde que renunció a su rol institucional en la monarquía británica han dejado al descubierto las faltas de acuerdos que hay en la familia real. Primero fue su entrevista junto a su esposa Meghan con Oprah Winfrey, y ahora la inminente publicación de las memorias que escribió sobre su vida como el 'repuesto' de su hermano mayor William, de las que ya se han filtrado muchos fragmentos y que habla del enfrentamiento que mantuvo con su hermano debido a una serie de comentarios críticos que este último realizó acerca de su esposa Meghan Markle.
Libro. Antes incluso de que saliera a la luz lo que Harry escribió en su libro, que se publicará el 10 de enero, estaba claro que en los círculos de la monarquía no iba a gustar en absoluto que revelara en público su problemas privados. Ahora el duque de Sussex confirmó lo que era un secreto a voces: que la relación con el actual príncipe de Gales se rompió y que no hablan desde hace "un tiempo". "Actualmente, no. Pero estoy deseando... espero que podamos encontrar cierta paz", aseguró en su conversación con Anderson Cooper. También reconoció que su situación actual disgustaría inmensamente a su mamá y que ella habría querido que se reconciliaran.
Ningún contacto. Tampoco ha tenido el contacto con su papá después de mudarse a California y perder el apoyo económico que él le daba. Llama poderosamente la atención que, cuando le preguntan por su trato con el actual rey, él no reitere que la puerta siga abierta para un acercamiento futuro, como sí hace en el caso de William.