Usarlo es como magia pura porque deja tus brochas impecables, ¡en menos de un minuto!
Encontrar un buen limpiador de brochas es como hallar el mejor labial nude para tu piel, o sea: ¡no es tarea fácil! Sin embargo, es muy importante ir en busca del mejor, no sólo por el simple hecho de que dejará tus pinceles limpios (y no llevará bacterias a tu rostro), sino también porque, entre más efectivo sea, menor será el tiempo que estés restregando tus brochas en el agua y el jabón para quitarles el maquillaje, y se mantendrán en perfecto estado durante más tiempo.
Beneficios. Remueve hasta el maquillaje waterproof y de larga duración de tus brochas, ¡sin necesidad de enjuague! Esto hace que las cerdas se sequen casi al instante y lo podrás comprobar con el tacto. La mejor parte es que no deja un olor desagradable, sino un ligero aroma a vainilla, y es cruelty free. Ya sea para acortar el tiempo al limpiar todas tus brochas de maquillaje o para salir de viaje y mantener tu kit limpio, este producto se convertirá en tu mejor aliado.
¿Cómo usarlo? Lo único que tienes que hacer son 3 sencillos pasos, pero sigue estos tips para no estropear tus brochas: Paso 1: agrega el limpiador en un recipiente totalmente limpio, con una cantidad suficiente como para cubrir ¼ de cerdas del pincel. Paso 2: introduce tu brocha en el limpiador (solamente la punta) y sácala de inmediato para que no se sature. ‘Las cerdas succionarán el líquido hacia la brocha y disolverán el maquillaje’, dice la marca, por lo que no es necesario meterla por completo. Paso 3: pasa la brocha sobre una servitoalla y repite hasta que no salga nada de maquillaje. Regresa los pelitos de la brocha a su forma original y deja secar al aire libre para volver a usarla. ¿Funciona en brochas muy grandes y sucias? Sí. Cinema Secrets sugiere ‘sumergir únicamente el 10% de la punta de la brocha y mantenerla en posición vertical durante 5 segundos, para que el líquido baje hasta la base’.