La presión arterial o hipertensión es considerada como uno de los principales indicadores de la salud cardiovascular, por lo que monitorearla es una forma importante para controlar afecciones cardíacas mayores entre visitas al médico, indica Harvard.
Tales como derrames cerebrales, infartos, presión alta, enfermedades cerebrovasculares y vasculares periféricas, insuficiencia cardíaca, arritmias o cardiopatías.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) casi la mitad de la población estadounidense adulta (116 millones) tiene hipertensión o presión arterial alta, mientras que esta condición ha sido por años una de las principales causas de muerte en el país; en 2019 se registraron más de medio millón de muertes.
¿Qué es la presión arterial?
La presión arterial, llamada signo vital, es una de las cuatro principales proveedoras de información sobre la cantidad de trabajo que realiza el corazón para bombear sangre a través de las arterias.
Los otros signos vitales son la temperatura corporal, ritmo cardíaco y frecuencia respiratoria.
Se mide mediante dos lecturas diferentes: la presión sistólica que representa el primer número o el más alto de la lectura y la presión diastólica que es el segundo número o el más bajo. Por ejemplo 117/80 mm Hg (milímetros de mercurio).
Según los expertos, la sistólica mide la presión dentro de la arteria cuando el corazón se contrae para bombear sangre, mientras la diastólica es la presión dentro de la arteria una vez que el corazón descansa entre latidos.
Los números más altos en cualquiera de los dos registros señalan que el corazón está trabajando más rápido y duro para bombear sangre en las arterias.
¿De cuánto es la presión arterial normal?
Los expertos de Harvard destacan que la presión normal es inferior a 120/80. Anteriormente, el Colegio Estadounidense de Cardiología y la Asociación estadounidense del Corazón señalaban que las pautas de normalidad eran de 140/90.
La presión comienza a catalogarse como elevada cuando los números oscilan entre 120-129 mm Hg sistólica y menos de 80 mm Hg diastólica.
¿De cuánto es la presión alta?
Por su parte, las pautas de presión arterial alta en etapa 1 son de 130 y 139 sistólica o entre 80 y 90 diastólica. La presión arterial de etapa 2 está por encima de 140 sistólica o 90 diastólica.
Las pautas de las crisis de hipertensión son superiores a 180 mm Hg sistólica y más de 120 mm Hg diastólica.
¿Cómo medir la presión desde casa?
Los expertos sugieren medir la presión de forma regular con especialistas o por medio de monitores hogareños. Estos deben colocarse en el brazo y no de muñeca o de dedos, ya que no suelen ser precisos.
Antes de medir la presión, no consumas bebidas con cafeína o alcohol por lo menos 30 minutos antes. Siéntate en silencio durante cinco minutos con la espalda apoyada y piernas sin cruzar.
Mantén el codo al nivel del corazón o cerca de él y evita hablar durante la medición.
Los expertos recomiendan registrar las lecturas de presión arterial junto con la hora del día, durante varios días para observar la constancia de los resultados, de esta forma se puede determinar cuál es la presión normal para cada persona.