Recientemente las redes sociales se inundaron de videos de gente probando dulces similares a cristales, cuarzos y todo tipo de piedras preciosas. Se popularizaron mayormente en canales de ASMR (respuesta sensorial meridiana autónoma) debido al placer que puede llegar a causar escuchar su crujiente sonido al masticarlos.
Estos dulces, llamados por los internautas “cristales comestibles” en realidad se llaman Kohakutou, cuya traducción literal es "caramelo de ámbar". Se trata de un dulce tradicional japonés hecho a partir de algas.
La textura de kohakutou es única, pues tiene una corteza exterior crujiente y en su interior, una especie de textura gelatinosa. Estos dulces bocados se hicieron tan conocidos que comenzaron a aparecer cientos de negocios dedicados a producirlos, sin embargo, a partir de la alta demanda, los precios se elevaron drásticamente.
Hoy es posible encontrar cristales comestibles principalmente en Estados Unidos, donde una caja con cuatro piezas puede alcanzar un precio de $500. A pesar de que su apariencia sea la de un alimento complejo debido a su belleza y delicadeza, el kohakutou se prepara con pocos ingredientes.
La base para preparar cristales comestibles es agua, azúcar y agar agar. Este último ingrediente es lo que le da la textura gomosa al kohakutou y se trata de un espesante similar a la grenetina, pero hecho de algas rojas comestibles.
Otra de las ventajas de hacer cristales comestibles es que puedes elegir los sabores que desees, con tan solo cambiar la esencia o el líquido con que lo elabores. Experimenta y prueba los crujientes cristales comestibles en casa y sin pagar una fortuna.
Cristales comestibles
Ingredientes
Receta base
4 cucharaditas de agar agar
1 3/4 tazas de agua fría
3 tazas de azúcar refinada
1/4 de cucharadita del saborizante deseado (limón, fresa, lavanda, etc.)
Colorante comestible líquido
Procedimiento
En una olla, combinar el agar agar y el agua. Dejar reposar durante 5 minutos.
Calentar la mezcla a fuego medio hasta que hierva, revolviendo constantemente, hasta que se disuelva por completo y la mezcla espese, de 2 a 3 minutos.
Agregar el azúcar y cocinar, revolviendo constantemente, hasta que se haya disuelto por completo y la mezcla esté espesa y almibarada, aproximadamente 3 minutos.
Retirar del fuego. Agregar el saborizante y revolver para combinar. Agregar el colorante y mezclar.
Verter la mezcla en un molde ligeramente engrasado con aceite. Refrigerar por 1 hora.
Desmoldar y cortar en triángulos, cuadrados y las formas deseadas.
Colocar los cristales comestibles sobre papel encerado y dejar reposar a temperatura ambiente durante 24 horas. Voltearlos y dejar reposar durante 24 horas más o hasta que se forme una costra crujiente en el exterior.