En la audiencia general celebrada este miércoles en el Aula Pablo VI, el papa Francisco recordó a su predecesor.
Cerca de 160 mil personas han podido despedirse ya del papa emérito Benedicto XVI tras visitar la capilla abierta desde hace tres días y que se cerrará este miércoles, mientras que se ultiman los preparativos del funeral de este jueves en la Plaza de San Pedro.
La Basílica de San Pedro volvió a abrir hoy a las 7:00 horas (6.00 GMT) y varios cientos de personas empezaron a entrar ordenadamente, pero sin las largas filas de los días pasados, para dar el último adiós a Joseph Ratzinger.
A las 12.00 horas locales (11.00 GMT), unas 24 mil personas se habían despedido del para emérito este miércoles, que se suman a las 135 mil que habían pasado por la Basílica de San Pedro en los dos primeros días, informó la sala de prensa del Vaticano.
Mientras, se ultiman los preparativos para la celebración mañana del funeral, que será presidido por el papa Francisco en la plaza de la Basílica de San Pedro, a partir de las 9:30 horas (8.30 horas), pero oficiado por el cardenal decano Giovanni Battista Re, debido a los problemas de movilidad del pontífice argentino.
Fue un gran maestro de catequesis, destaca el papa Francisco
En la audiencia general celebrada en el Aula Pablo VI, Francisco recordó hoy a su predecesor: "Antes de comenzar esta catequesis, quisiera que nos uniéramos a los que están aquí a nuestro lado rindiendo homenaje a Benedicto XVI y dirijo mi pensamiento a él, que fue un gran maestro de catequesis" con un "pensamiento agudo y educado no autorreferencial, sino eclesial".
En el funeral se prevé la presencia de más de 400 obispos y 4 mil sacerdotes para unas exequias que serán casi en su totalidad como las de los papas "reinantes", a excepción de algunos pequeños detalles debido a su condición de emérito en el momento de la muerte.
Como no se trata de un funeral de Estado, sólo se han invitado a las delegaciones oficiales de Alemania e Italia, así como a numerosos representantes ecuménicos, mientras que entre las personalidades previstas se espera a la reina emérita de España, doña Sofía, y el rey Felipe de Bélgica.
La delegación italiana estará encabezada por el jefe del Estado, Sergio Mattarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni, al igual que la alemana, que estará guiada por el presidente, Frank-Walter Steinmeier, y su canciller, Olaf Sholz.