Su divorcio se convirtió en el más costoso de Hollywood y a la fecha es un acontecimiento que es recordado como un sacrificio enorme.
El 26 de diciembre, pero del 2011 marcó un antes y después para el actor Mel Gibson, quien perdió su fortuna tras firmar, después de varios años, el divorcio de Robyn Moore, quien fuera su esposa por casi tres décadas.
En aquella época, Gibson había acumulado una fortuna de 850 millones de dólares tras participar en más de 50 series y películas, y aunque él y su pareja anunciaron en 2006 que, de común acuerdo se separarían, el divorcio implicó un pago por parte del actor que lo dejó sin pensión.
La razón fue que antes de convertirse en una estrella de Hollywood, cuando el actor se casó con Moore no establecieron un acuerdo prenupcial, decisión que después le trajo consecuencias.
El protagonista de "Arma letal" le tuvo que dar alrededor de la mitad de su fortuna a su exesposa, un monto total de 425 millones de dólares, lo cual lo dejó casi en bancarrota, misma de la que aún no se recupera.
Su divorcio se convirtió en el más costoso de Hollywood y a la fecha es un acontecimiento que es recordado como un sacrificio enorme. Desde entonces Mel ha participado en 10 producciones más incluyendo "Vacaciones en el infierno" y "Sangre de mi sangre", con Diego Luna.
Producto de la relación que el también director ganador del Oscar tuvo con Robyn, con quien se casó en 1980, vinieron siete de los nueve hijos que hoy tiene el histrión.
Hasta el 2 de agosto del 2022 la fortuna de Mel Gibson se seguía calculando en 425 millones de dólares, poco menos de lo que le dejó aquel divorcio; sin embargo, también sigue siendo considerado uno de los actores más ricos del mundo.