60 dólares por barril, es lo que se acordó establecer en asamblea de los países que conforman la UE.
Diplomáticos de la Unión Europea acordaron este viernes establecer un precio máximo de 60 dólares por barril para los cargamentos de petróleo ruso, según Andrzej Sados, embajador de Polonia en el bloque y negociador clave de la política, así como otros miembros de la Unión Europea, diplomáticos y funcionarios que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar con los medios. La política, ideada por el Grupo de los 7 países industrializados y sus aliados, tiene como objetivo limitar los ingresos de Rusia y evitar un shock petrolero mundial.Se esperaba un anuncio oficial del G7 para el domingo, dijeron diplomáticos y funcionarios. Las conversaciones para establecer el tope en Bruselas fueron polémicas y duraron más de una semana.
El embargo de la Unión Europea sobre la gran mayoría de las importaciones de petróleo ruso entra en vigor el 5 de diciembre, por lo que el precio se aplicaría a los compradores fuera de la región. El tope de precio aseguraría un descuento existente en el crudo ruso en comparación con las alternativas de otras partes del mundo.
60 dólares el barril. A 60 dólares por barril, el tope es un poco más bajo de lo que pagan actualmente los principales compradores de petróleo ruso, como China e India, pero no se aplicaría si los compradores envían y aseguran los cargamentos con compañías de países fuera del grupo que imponen el tope. Es poco probable que se reduzca drásticamente los ingresos petroleros de Rusia, que son fundamentales para su esfuerzo de guerra en Ucrania. Los diplomáticos de la Unión Europea también acordaron lanzar otra ronda de conversaciones sobre sanciones este fin de semana, con miras a imponer nuevas restricciones a la economía rusa y a personas clave.
Precios. La promesa fue clave para cerrar el trato sobre el tope de precios, ya que varias naciones europeas proUcrania de línea dura, encabezadas por Polonia, consideran que el tope de precios no es lo suficientemente perjudicial para los ingresos de exportación de Rusia. La UE ya había decidido prohibir a los países del bloque comprar petróleo ruso por mar a partir del 5 de diciembre. Esta medida eliminaría dos tercios de las compras europeas de crudo.