Con su característico acordeón, pero también intercalando con el teclado y hasta el ukulele y la guitarra
Julieta Venegas regresó a México, precisamente a la capital del país, donde su público la arropó como lo hizo en el Vive Latino, Festival Ceremonia o conciertos en solitario, sus mensajes y sus ritmos llevan a sus seguidores desde el festival más ecléctico al recinto más íntimo.
"Regresar aquí es algo muy especial, a este lugar que me pide 'Quedate, quedate'", confesó Julieta después de tres canciones, antes de tocar "La nostalgia" "de aquellos lugares a los que no podemos regresar", describió.
Pero antes de poder advertirlo, las caricias de la música melancólica y tranquila, pasaron a ser gritos de justicia y libertad, primero con su nueva canción "Caminar sola", donde relata el miedo que siente precisamente al abandonar algún lugar de noche, o solamente caminando por ahí.
Y antes de cerrar su repertorio, un clásico que suele presentar, y que incluso el movimiento feminista ha acogido como un emblema “Mujeres”, donde busca dignificar, y recordar a aquellas que han sufrido desapareiciones forzadas, coincidiendo además con el 25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
Pero entre los gritos de rebeldía y apoyo a las mujeres, Julieta no dejó pasar los clásicos "Lento", "Me voy", "Eres para mi", para cerrar "Con Limón y Sal", una noche redonda, donde también introdujo temas de José Alfredo Jiménez. "Esta canción, siempre que la toco fuera, les tengo que enseñar el coro, pero sé que ustedes se la saben", dijo Julieta antes de interpretar a uno de los máximos compositores del país.
Con su característico acordeón, pero también intercalando con el teclado y hasta el ukulele y la guitarra, vestida de blanco para completar su carácter bohemio, Julieta recibió además las mañanitas por su cumpleaños 52, que fue un día antes de su presentación en el Teatro Metropólitan.
Luego de tocar "El presente" que puso a brincar a todo el recinto, la gente pidió otra y Julieta dobló la petición al responder con dos canciones más, al final se reunió y "con buena onda", una sonrisa y acompañada de sus tres músicos, Julieta se despidió con una reverencia.