El mexicano es considerado uno de los más importantes e influyentes economistas en Iberoamérica.
Agustín Carstens, gerente general del Banco de Pagos Internacionales, exgobernador del Banco de México (Banxico) y exsecretario de Hacienda, fue elegido para recibir el Premio Rey de España de Economía.
Premio. En su decisión, el jurado consideró que el economista mexicano es uno de los más importantes e influyentes responsables de la política económica en el ámbito iberoamericano. en las últimas tres décadas. Nacido en la Ciudad de México en 1958, Carstens Carstens es licenciado en Economía por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y doctor por la Universidad de Chicago. Inició su carrera profesional en el Banxico, donde ocupó cargos como tesorero, director general de Investigaciones Económicas y finalmente gobernador. En el gobierno mexicano, fue subsecretario y posteriormente Secretario de Hacienda y Crédito Público. A nivel continental, fue presidente del Consejo de Estabilidad Financiera para las Américas y miembro del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA) y de la Asociación de Supervisores Bancarios de las Américas (ASBA). Carstens fue miembro del Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI), presidente de su Comité Monetario y Financiero y director gerente adjunto de dicha institución. Además, ha sido miembro de la Junta Directiva del Banco de Pagos Internacionales y presidió varios de sus comités antes de ser nombrado gerente general. “En las diferentes responsabilidades que ha ocupado a lo largo de su carrera, Agustín Carstens se ha destacado por la solidez y profundidad de sus análisis y por su capacidad de generar nuevas ideas, así como por su liderazgo y capacidad de negociación para implementar políticas que contribuyan a mejorar el uso de los recursos públicos y el bienestar de los ciudadanos”, apuntó el jurado.
“Ha sido un actor destacado en las principales transformaciones de la economía mexicana en las últimas décadas: la estabilización macroeconómica tras la ‘crisis del tequila’; la modernización del marco regulatorio del sistema financiero mexicano; la reforma de los sistemas tributario y de pensiones del sector público; y el régimen de autonomía del Banco de México. En resumen, ha impulsado la transición de México a un mercado emergente altamente integrado a la economía internacional, con uno de los mercados de deuda pública más sofisticados del mundo emergente”. El jurado del Premio Rey de España de Economía también resaltó sus aportes a la política económica internacional: el desarrollo del esquema de metas de inflación actualmente utilizado por la mayoría de los bancos centrales; sus aportes analíticos y operativos al funcionamiento de los tipos de cambio flexibles, y la introducción de Cláusulas de Acción Colectiva en las emisiones de deuda pública.
El Premio Rey de España de Economía fue instituido en 1986 por la Fundación José Celma Prieto para reconocer la trayectoria científica y profesional de personalidades españolas e iberoamericanas en el campo de la economía.