De muchas formas, tamaños y colores los turbantes son simbólicos en este país y en gran parte del mundo árabe, por ello Qatar se pone a tono en busca de apoyar a cada una de las selecciones participantes en esta Copa del Mundo.
Así que la industria de esta prenda en este país aprovecha la inercia futbolera y realiza-vende turbantes conmemorativos de los equipos, así como también la venta de trajes tradicionales que entre la elegancia y frescura capta la atención de los aficionados de otras partes del mundo en busca de ponerse a tono en el mundo árabe y apoyar a su combinado. Los negocios de turbantes abrieron sus horizontes y crearon los de las 32 selecciones.
México no se podía quedar atrás y aparecía entre los aparadores, por 99 reales qataríes, 350 pesos mexicanos, el verde, blanco y rojo era uno de los turbantes más coloridos, “pero el que se vende más es el de Argentina y Brasil”, decía Amiyalah, uno de los vendedores entre un inglés más fluido.