Haciendo gestos quedó un auto cuando se estrelló contra las barreras de contención del camellón en el cruce de los bulevares Acereros y Madero la madrugada de ayer. Los tubulares cumplieron su función.
Fue a las 01:30 horas cuando un Ford Mustang, color rojo se desplazaba en dirección de poniente a oriente por el Madero. Iba como "Como alma que lleva el diablo" exponiendo su vida y la de los demás conductores o peatones que anduvieran a esas horas.
Por alguna razón que hasta el momento se desconoce, el chofer se proyectó de lleno a la velocidad que llevaba contra los tubulares de contención de la ciclovía, instalados para proteger a los ciudadanos que se ejerciten o caminen.
Éste se encajó prácticamente en ellos además de alcanzar a dañar el semáforo ocasionando severos destrozos principalmente en el auto deportivo.
Agentes de peritaje de control de accidentes además de socorrista del grupo de urgencias básicas de Coahuila llegaron al lugar así como protección civil ya que reportaron el percance sumamente grave.
Sin embargo el conductor del Mustang logró darse a la fuga antes que llegaran agentes de peritaje de control de accidentes y le echaran el guante para llevarlo a la comandancia.
Las autoridades ordenaron que el vehículo fuera llevado un corralón no sin antes realizar las investigaciones correspondientes indicando que el percance pudo haber matado al conductor quién corrió con suerte.
Además se destacó la importancia de colocar barreras de contención, principalmente en las esquinas o negocios pues el ejemplo de ayer fue muy contundente y demostraron cumplir con el objetivo qué es detener un vehículo.