Campesinos están recibiendo 40 mil litros de agua al día en dos comunidades, ante el riesgo de que el arroyo esté contaminado por el hidrocarburo derramado.
Campesinos de las comunidades El Triunfo y José María Morelos y Pavón, que pertenecen al municipio de San Juan Guichicovi, ubicado en el Istmo de Tehuantepec, emplazaron a las autoridades de Petróleos Mexicanos (Pemex) para que paguen los daños ocasionados por un derrame de combustible ocurrido el domingo 23 de octubre, derivado de una toma clandestina.
De acuerdo con el reporte emitido por el coordinador municipal de Protección Civil de San Juan Guichicovi, Onofre Ruiz Lucas, en total fueron afectados directamente 38 campesinos de las comunidades de El Triunfo y José María Morelos y Pavón, cuyas tierras, sembradíos de maíz y pastoizales se contaminaron con el combustible, al igual que el arroyo Visurini.
El presidente municipal de San Juan Guichicovi, Heberto Luis Zacarías, destacó que desde que personal de Pemex detectó el derrame en un poliducto de 16 pulgadas y reselló la tubería, el lunes 24 de otubre, y a pesar de que hallaron peces, tortugas, aves, mapache y otras especies endémicas muertas, nadie de la empresa petrolera ha vuelto a poner un pie en la zona.
Los campesinos, dijo el edil, pidieron a Pemex que analice las condiciones del agua del arroyo donde la población se abastece y en el que el ganado bebe, que mejore sus condiciones de vigilancia de los ductos para que se detecten a los que se dedican al robo de gasolina, y que atienda las afectaciones a los cultivos de maíz y de pastizales.
Por el momento, ante el riesgo de que el agua esté contaminada, cada tercer día el gobierno municipal de San Juan Guichicovi entrega 40 mil litros de agua a las poblaciones de El Triunfo y José María Morelos, debido a que el arroyo Visurini, de donde se abastecen, sigue con rastros de la gasolina derramada desde el domingo 23 de octubre.
Luis Zacarías adelantó que los campesinos de El Triunfo y de José María Morelos y Pavón, afectados por el derrame y molestos ante el silencio de los funcionarios de Pemex, han decidido esperar que pasen los días conmemorativos de Todos Santos y Día de Muertos, y si no hay presencia de empleados de la empresa petrolera en la zona afectada, analizan protestar con bloqueos de carretera.
Hasta ahora, una semana después del derrame, ni Pemex, ni la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) han visitado el área del desastre, donde de acuerdo con un diagnóstico de la coordinación municipal de Protección Civil, hay unos 10 kilómetros del arroyo Visurini contaminados con residuos de gasolina.
EL UNIVERSAL ha buscado a autoridades de Pemex para consultarla sobre los derrames de hidrocarburo en el Istmo, pero hasta el momento no se ha obtenido respuesta alguna.