Esta planta es utilizada en la cocina, sin embargo, tiene más propiedades enfocadas en su uso medicinal.
Entre la larga lista de plantas medicinales, una de las pocas que combina sus propiedades curativas con las culinarias es el Romero, además su origen es mediterráneo, cuyo uso se remonta a la antigua Grecia, y que llegó a América a través de frailes españoles durante la época de la conquista.
La planta del Romero se cultiva en climas cálidos, semicálidos, semisecos y templados, desde los 899 a los 3 mil 900 metros sobre el nivel del mar. Su crecimiento es tan común que de igual forma puede ser cultivada en huertos familiares o crece en terrenos de cultivo abandonados.
El uso en la cocina del Romero
El Romero es una planta que se utiliza en la cocina, pues sus hoja se usan para sazonar, una ramita u hoja de Romero combina con todo tipo de preparación, incluso se puede mejorar el sabor de los alimentos si se mezcla con aceite de oliva.
Cuando se trata de cortes de carne, por ejemplo, las piezas regularmente se cocinan únicamente con sal, pimienta, ajo y romero.
Esta planta incluso evita la oxidación de lípidos y la formación de olores dichos como “pasado”, “húmedo”, “cartón”, “hierba” o “rancio”, en la carne.
El uso medicinal del Romero
La principal cualidad del Romero en la salud es su alto contenido en antioxidantes, pero no se limita ahí, ya que también tiene propiedades estimulantes, aperitivas y digestivas.
De igual forma, el uso del Romero se ha relacionado con la mejora de la circulación, principalmente de las extremidades, así como un efecto antirreumático, alivio de dolores neurálgicos, cólicos menstruales y trastornos nerviosos.
El extracto de Romero también es usado en la medicina popular como estimulador y mejorador de la memoria.
Por otra parte, se ha implementado en experimentos antibacterianos y antiflogísticos. Además, tiene una acción antioxidante, citotóxica y anticancerígena.
El Romero también mejora la cognición y tiene el potencial de influir en el nivel de glucosa en pacientes diabéticos, modifica la fermentación microbiana ruminal y mejora la reabsorción ósea.