El secretario de Gobernación consideró necesario reconocer que han fallado en atacar la delincuencia, pues expuso que municipios y estados no hicieron su tarea y le dejaron toda la carga a la federación
El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, fue recibido en Veracruz con quejas de legisladores del PRI y Movimiento Ciudadano por la falta de resultados en materia de seguridad y el grito de morenistas de “es un honor estar con Obrador, es un honor estar con Obrador”.
En la sede del Congreso del Estado, el funcionario federal expuso las bondades de la reforma constitucional en materia de Guardia Nacional y escuchó las alabanzas de Morena y de sus partidos aliados, así como severas críticas al gobierno federal y estatal de legisladores de oposición.
La bancada panista decidió no participar en las exposiciones ante el Secretario de Gobernación, quien los criticó porque -señaló- “tiran la piedra y esconden la mano, lamentable que no hayan querido intervenir”.
En su mensaje inicial, Augusto López reconoció que los municipios y estados fallaron en su tarea de ganarle la batalla a la inseguridad, por lo cual -dijo- es necesaria la participación de las fuerzas armadas.
Ante el gobernador morenista Cuitláhuac García Jiménez, destacó que hay estados y municipios que no tienen un solo policía municipal.
“Y así es inviable ganarle la batalla a la inseguridad, por eso necesitamos de las fuerzas armadas, no es que se esté militarizando al país, por el contrario está establecido en la Constitución que el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas es un civil”, expuso.
Afirmó que el comandante supremo es el presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien -manifestó- todos conocen “y nunca daría la instrucción de reprimir al pueblo”.
Consideró necesario reconocer que han fallado en atacar la delincuencia, pues expuso que municipios y estados no hicieron su tarea y le dejaron toda la carga a la federación.
La legisladora del Movimiento Ciudadano, Maribel Topete, reconoció a las fuerzas armadas, pero recordó que desde el 2007 el despliegue militar ha aumentado y no ha mejorado.
Como ejemplo puso las más de 120 mil personas asesinadas, más de tres mil feminicidios y 35 mil desaparecidos durante el sexenio morenista.
“La discusión no debe servir para definir qué construimos a partir de ahora, la reforma no resuelve la inseguridad, nos convoca a corregir el camino, protejamos a nuestras fuerzas armadas, exponerlas a más tiempo a tareas que deben ser asumidas por autoridades civiles, representa una carga para ellos, las orilla a la politización e incertidumbre jurídica”, denunció.
En tanto, la legisladora priista, Anilú Ingram, describió una violencia compleja y delicada en materia de inseguridad, por lo que expuso que el debate no debe reducirse a militar o no militarizar al país.
“Mientras gente afuera sufre la violencia, el gobierno estatal y federal relega su responsabilidad a las fuerzas armadas y abandonan y han abandonado a las corporaciones de las policías locales”, acusó.
Señaló al gobierno morenista de haber reducido y desaparecido fondos para fortalecer las policías estatales y municipales, por lo que estamos ante el sexenio más violento de la historia política de México, con más 130 mil homicidios dolosos, diez mujeres asesinadas cada día y 55 periodistas asesinados.
“No se laven las manos frente al problema de inseguridad y violencia, tampoco se trata de un cheque en blanco de las fuerzas armadas ni de un paso a la militarización”, dijo tras anunciar que votarían a favor de dicha reforma.
Y luego de jugar con cuáles son las mejores horchatas de México, definiendo que son las de Tabasco, el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, el morenista Juan Javier Gómez Cazarín adelantó que no les temblaría la mano para aprobar dicha reforma y concluyó su intervención con un “es un honor estar con Obrador”.
El funcionario federal respondió a las legisladoras de Movimiento Ciudadano y del PRI que no estaba de acuerdo con su imagen del país y recordó al priismo que se trata de una iniciativa que no emana del Ejecutivo, sino de una diputada tricolor.