El bullpen vuelve a costarle a los Yankees en la postemporada. Jameson Taillon fue a la par de Justin Verlander por las primeras cinco entradas, que terminaron empatadas, pero cuando llegó el turno de los relevistas, volvieron a fallar y Houston se llevó el Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana por pizarra de 4-2.
Clarke Schmidt está siendo el blanco del 'odio' de los aficionados de los Yankees. No pudo mantener la ventaja en el Juego 3 ante Cleveland y volvió a fallar el miércoles.
Abre el camino. Yankees pegó primero con cuadrangular solitario de Harrison Bader, pero de inmediato lo igualó Houston en un doblete de Martín Maldonado. Ambas novenas fueron colgando ceros, no de la forma más ortodoxa ni dominante, hasta que llegó la baja de la sexta.
Schmidt, que se estaba vistiendo de héroe al obligar un rodado para doble play con casa llena en la quinta, falló en la siguiente entrada.
Yuli Gurriel la desapareció para abrir el capítulo y lo emuló Chas McCormick a la banda contraria. Jeremy Peña se sumó a la fiesta de cuadrangulares solitarios en la baja de la séptima ante Frankie Montas, recién activado tras perderse por lesión la serie ante Cleveland.
Verlander maniató a la ofensiva de los Yankees tras un inicio titubeante. En la primera y la tercera tuvo corredores en posición de anotar, además de permitir carrera en la segunda.
Pero encontró el norte y llegó a ponchar a 9 de 11 entre la tercera y la sexta. Terminó con 11 pasados por los strikes, llegando a 219, rompiendo el récord de todos los tiempos en la postemporada, que tenía Clayton Kershaw con 213.
Su octavo partido de Playoffs con doble dígito de ponches, dos más que cualquier otro pitcher en la historia. Houston tuvo que sudar frío.