Ambos individuos llegaron a Rusia a través de Estonia siguiendo órdenes del Servicio de Seguridad de Ucrania.
El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, por sus siglas en ruso) ha anunciado este miércoles que dos atentados que preparaban las fuerzas ucranianas han sido frustrados. Un ataque iba a ser perpetrado mediante el uso de dos sistemas portátiles de defensa aérea Iglá, mientras que el otro implicaba el uso de explosivos.
Según el FSB, un ciudadano de Ucrania que fue detenido en la provincia de Moscú transportó los complejos Iglá en coche a escondidas "para la preparación de ataques terroristas", siguiendo las instrucciones del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, por sus siglas en ucraniano). También había elegido un lugar para su almacenamiento secreto. Además de las armas, los agentes incautaron los equipos de comunicación que confirman tanto sus acciones delictivas, como sus contactos con el SBU.
Otro ucraniano detenido por los agentes rusos preparaba un sabotaje de carácter terrorista en una de las terminales de transporte y logística de la ciudad de Briansk, capital de la provincia homónima, colindante con Ucrania. El FSB encontró un alijo de componentes para artefactos explosivos preparado por el servicio secreto ucraniano.