El neerlandés fue el ganador, el de Mónaco segundo y Checo Pérez fue tercero
Fue un Gran Premio muy largo, más de tres horas, aunque de carrera muy poco por la lluvia en Japón.
A las 12:00 horas del tiempo del centro de México dio inicio el GP japonés, pero a la tercera vuelta, ya con abandonos, una bandera roja apareció y detuvo por más de dos horas la competición.
Y pasadas las dos de la mañana (tiempo de México), la FIA y la F1 decidieron reanudar la carrera, con el Safety Car que dio algunas vueltas, para luego salir y permitir la bandera verde que reanudó las actividades.
Fueron 40 minutos, muy pronto todos los equipos metieron a sus pilotos a los pits para dejar las Full Wet para poner gomas intermedias.
Pero eso no detuvo a Max Verstappen, que en un inicio batalló con la presión de Charles Leclerc, pero pronto dejó atrás al monegasco, que sufría con sus neumáticos y la presencia del mexicano Checo Pérez.
Antes de la caótica detención, Pérez subió al tercer puesto y desde ahí luchó en una dura batalla contra el F175 de Charles.
Al final, el neerlandés fue el ganador, el de Mónaco segundo y Checo Pérez fue tercero, pero las cosas cambiaron tras cruzar la meta.
Leclerc fue investigado por salir de la pista y recibió penalización de cinco segundos, por lo que el mexicano sube al podio en segundo puesto.