Con enfrentamientos en una docena de ciudades, huelgas y abucheos al presidente iraní, Ebrahim Raisí, Irán vivió este sábado una de las jornadas más duras de las protestas desatadas por la muerte de Mahsa Amini.
Tras tres días de asueto sin protestas -el miércoles fue festivo y jueves y viernes son el fin de semana en el país- la semana iraní comenzó con renovados gritos de “Mujer, libertad vida” tras las llamadas a movilizaciones por parte de centros universitarios y activistas. En los alrededores de la prestigiosa Universidad de Sharif de Teherán pequeños grupos de jóvenes y mujeres sin velos se arremolinaban en esquinas desde las que lanzaban eslóganes, en medio de una fuerte presencia policial, con docenas de antidisturbios por la zona.