Se ha demostrado el poder terapéutico que se tiene la compañía y convivencia con perros, gatos, conejos, caballos e incluso hámsteres.
Son muchos los estudios que han confirmado que los perros y gatos tienen un efecto terapéutico tanto para adultos como para niños. De hecho, la terapia con animales para efectos terapéuticos ha sido usada a lo largo de los años para ayudar a personas con diferentes afecciones mentales y físicas.
Estas son algunas de sus tantos beneficios:
1. Evitan el sentimiento de soledad
Contar con una mascota en casa ayuda a que la persona se sienta más segura de sí misma y más protegida. También puede ayudar a evitar estados como la depresión por sentimiento de soledad, ya que su compañía estimula el contacto físico y la comunicación.
2. Alivian la depresión
Las personas deprimidas no sienten el deseo de convivir. Cuando una persona mantiene un vínculo con una mascota, tiene un motivo para levantarse de la cama. Quizá no tenga ganas de hacer nada, pero sabe que debe darle de comer y en el caso de los perros, por ejemplo, sacarle a la calle. Es frecuente que la persona deprimida no se desahogue con nadie, pero quizá sí se siente capaz de hablarle a su mascota.
3. Aumentan el sentimiento de felicidad
Los dueños de mascotas, tras compartir un rato de juegos, experimentan un aumento de oxitocina, se estimula la producción de serotonina y la dopamina, al mismo tiempo que el cortisol se disminuye, todas estas hormonas ayudan a disminuir los niveles de estrés y son un buen antídoto contra la depresión.
4. Reducen el estrés
En un estudio de una universidad de estados unidos, midió las ondas cerebrales de distintos dueños de perros antes y después de pasar un rato con ellos. Estos estudios han revelado que tener una mascota y acariciarla frecuentemente, ayuda a reducir los sentimientos de estrés, ansiedad y depresión. Por lo que se aconseja acariciar, jugar, pasear e incluso hablar con las mascotas para despejar la mente.