Los científicos creen que llegó ahí por medio del cinabrio que utilizaban esa civilización para pintar.
Las antiguas ciudades mayas como Tikal y Cerén estaban contaminadas con mercurio, según una indagación reciente donde pudieron examinar el suelo de esta zona. La exposición a este elemento químico puede haber sido una amenaza para los mayas y podría ser un riesgo para los arqueólogos actualmente, según explicó el equipo que estudió las muestras.
El mercurio probablemente se acabó colando al suelo debido al cinabrio que los mayas utilizan para tareas diarias, como pintar casas o diseñar objetos de cerámica. La investigación ha sido expuesta ahora en Frontiers in Environmental Science.
Según el coautor del estudio, Nicholas Dunning, geoarqueólogo de la Universidad de Cincinnati, los mayas creían que el cinabrio contenía ch’ulel (fuerza del alma), lo que lo convertía en una sustancia sagrada que se usaba regularmente en contextos decorativos.
Los mayas usaban el cinabrio como pintura para las paredes y las piezas de cerámica. Más tarde, ese cinabrio acabaría filtrando el mercurio en el suelo y en el agua de la zona.
“En este punto, los arqueólogos todavía no han buscado mercurio en los restos óseos encontrados en los entierros mayas, por lo que es imposible decir si aparecerán signos de contaminación en tales investigaciones”, dijo Dunning a Gizmodo por correo electrónico. “Una complicación que obstaculizará dicha investigación es que muchos entierros reales y de otras élites incluían polvo de cinabrio, que era rociado generosamente sobre los esqueletos y podía filtrarse a los huesos”.
En una investigación anterior, un equipo en el que participaba Dunning encontró mercurio en los antiguos depósitos de agua potable de Tikal. El nuevo trabajo amplía esos hallazgos midiendo la presencia de mercurio en yacimientos mayas en Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras y México.
“Descubrir mercurio enterrado a tanta profundidad en suelos y sedimentos de las antiguas ciudades mayas es algo difícil de entender, hasta que empezamos a considerar la arqueología de la región, que nos dice que los mayas usaron mercurio durante siglos”, dijo Duncan Cook, geógrafo de la Universidad Católica Australiana y coautor del artículo, en un comunicado.
Los investigadores sugirieron que los próximos proyectos arqueológicos deberían tener una mayor protección en los yacimientos que conocemos que tienen altas concentraciones de mercurio. Es importante saber cómo los mayas se las apañaron para decorar sus ciudades con estos elementos tóxicos, pero no a costa de la salud de los arqueólogos.