Las fronteras del país se han llenado de jóvenes que intentan salir para evitar ir a la guerra.
Ante la fuga de jóvenes rusos que no están dispuestos a participar en la guerra en Ucrania, el presidente ruso, Vladímir Putin, tomó cartas en el asunto: endureció las penas para delitos relacionados con los tiempos de guerra.
De acuerdo con la cadena CNN, el portal jurídico del gobierno publicó una serie de enmiendas, según las cuales, negarse a seguir las órdenes de un oficial superior en tiempo de guerra, durante un conflicto armado o en operaciones de combate, así como la negativa a participar en operaciones militares o de combate en esos momentos, pueden castigarse hasta con 10 años de prisión.“La ley federal también introduce la responsabilidad penal del personal militar por la rendición voluntaria, así como la responsabilidad penal por el saqueo durante la ley marcial, en tiempo de guerra o en condiciones de conflicto armado u operaciones de combate”, señala un comunicado del Kremlin.
El castigo para los condenados a prisión por cometer delitos especialmente graves puede ahora ser sustituido por trabajos forzados u otro tipo de castigo más suave solo después de que se hayan cumplido al menos dos tercios de la pena de prisión, según el comunicado del Kremlin.
La decisión se da luego de que la semana pasada, Putin anunciara la convocatoria a 300 mil reservistas para el conflicto con Ucrania, en lo que llamó “movilización parcial”; desde entonces, las fronteras del país se han llenado de jóvenes que intentan salir para evitar ir a la guerra.