Reconoció el error, pero no se disculpó por lo sucedido.
Las pruebas de clasificación de la Nascar Martinsville 300 en Virginia, Estados Unidos, vivió momentos de tensión este sábado.
Todo por la actitud de unos de sus pilotos, quien ante la frustración de quedar eliminado atacó a su rival en plena pista, sin importar las cámaras de televisión.
Los involucrados fueron Davey Callihan y Andrew Grady, este último quien agredió con golpes y patadas al vehículo a su compañero, mismo que durante todo el ataque no se bajó del automóvil.
La reacción de Andrew Grady, rápidamente, se hizo viral en redes sociales y en una entrevista posterior reconoció el error, pero no se disculpó por lo sucedido."Hay idiotas que no pueden manejar una máquina de cortar pasto y mucho menos una Martinsville", finalizó.