Según medios británicos, el monarca aceptó conferir a los hijos de Enrique y Meghan, los títulos de príncipe y princesa, pero no el de Su Alteza Real.
La muerte de la reina Isabel II significó, además de la pérdida de la única monarca que ha conocido Reino Unido en 70 años, un reacomodo en los títulos de los miembros de la familia real. Sin embargo, ese reacomodo parece ser el motivo de la primera discusión de Enrique y Meghan con el rey Carlos III.
De acuerdo con medios británicos como The Sun, el monarca aceptó conferir a los hijos de Enrique y Meghan, Archie y Lilibeth, los títulos de príncipe y princesa, pero no el de Su Alteza Real.
El argumento es que Enrique y Meghan decidieron no usar sus títulos y abandonar sus labores reales cuando se mudaron de Londres a California, hace dos años y medio.
Los duques de Sussex habrían alegado que las princesas Beatriz y Eugenia, hijas del príncipe Andrés, mantienen el título de Su Alteza Real a pesar de no ser miembros activos de la realeza.
El título de Su Alteza Real incluye beneficios como la subvención soberana, una suerte de sueldo por representar a la corona en eventos públicos, así como seguridad privada financiada por la monarquía británica.
Según The Sun, el príncipe Enrique salió “furioso” de una conversación con su padre, el rey Carlos III, sobre este tema.
“Harry y Meghan estaban preocupados por el tema de la seguridad y ser príncipe y princesa les da derecho a tener ciertos niveles de seguridad real. Ha habido muchas conversaciones durante la última semana”, dijo una fuente al diario británico.
Dicha fuente señaló que Harry y Meghan “quedaron furiosos porque Archie y Lilibet no pueden tomar el título de Su Alteza Real. Ese es el acuerdo: pueden ser príncipe y princesa, pero no Su Alteza Real porque no son miembros activos de la realeza”.
Este sábado tendrá lugar la llamada “vigilia de los príncipes”, en la que los nietos de la reina Isabel II montarán guardia en torno a su féretro, en el Palacio de Westminster. Se había dicho que Enrique no podría llevar su uniforme militar, tras haber perdido también sus títulos militares con el “Megxit”. Sin embargo, el rey Carlos III habría decidido hacer una excepción para permitir que su hijo lleve uniforme militar en esta ocasión.