México ya está aceptando migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador que han sido rechazados por EU.
La Casa Blanca ha estado instando en secreto México a aceptar más migrantes ilegales expulsados de los Estados Unidos, bajo la política de salud del Título 42, a pesar de que la administración públicamente quiere eliminarlos, según un nuevo informe. México ya está aceptando migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador que han sido rechazados por Estados Unidos. Sin embargo, Reuters ha informado que los funcionarios de la administración de Biden ahora están presionando a la Ciudad de México para que reasiente a los migrantes de Cuba, Nicaragua y Venezuela a medida que la crisis fronteriza se intensifica y los cruces se disparan a niveles récord.
El secretario de Estado, Antony Blinken, expresó su preocupación por el aumento de migrantes de esos tres países durante una visita oficial el lunes, dijeron al servicio de noticias dos funcionarios estadounidenses y dos mexicanos. México no prometió ninguna acción específica y tratar de convencerlos fue una batalla cuesta arriba, dijeron las autoridades. La Casa Blanca ha intentado en repetidas ocasiones levantar el Título 42, la orden de salud COVID que el expresidente Donald Trump implementó a principios de 2020 como una forma de enviar rápidamente a los migrantes de regreso a través de la frontera sin escuchar sus solicitudes de asilo en medio de la pandemia en curso.
Crisis migratoria. Un juez federal designado por Trump en Louisiana bloqueó el impulso de la administración para poner fin a la orden a principios de este año. Pero a puerta cerrada, algunos funcionarios de Biden ve la orden de expulsión como una forma de ayudar a frenar la crisis en curso, a pesar de que va en contra de la política de fronteras abiertas que los demócratas han estado impulsando, dijo un funcionario estadounidense. En lo que va del año fiscal, México ya ha recibido a unos 299 mil migrantes de Guatemala, Honduras y El Salvador que han sido detenidos en la frontera con Estados Unidos.
9 mil migrantes. En comparación, solo 9 mil migrantes de Cuba, Nicaragua y Venezuela han sido devueltos a México. A muchos de los inmigrantes de esas naciones se les permite permanecer en los EE. UU. para presentar solicitudes de asilo porque son más difíciles de deportar debido a las frías relaciones diplomáticas con sus respectivos gobiernos. El gobierno mexicano no quiere aceptar más inmigrantes porque La Habana, Managua y Caracas tampoco aceptarán deportaciones de México, dijeron dos funcionarios a Reuters.
Repatriaciones. Un vocero del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca no discutió las “conversaciones diplomáticas” entre Estados Unidos y México, pero dijo que algunos países de la región “ya han comenzado a asumir la responsabilidad colectiva de gestionar los flujos migratorios, incluso a través de repatriaciones”. La Casa Blanca también está tratando desesperadamente de encontrar formas de llevar la responsabilidad de los migrantes a otros países como Panamá, según funcionarios.
Frontera segura. El impulso para que México acepte más migrantes se produce después de que la vicepresidenta Kamala Harris, a quien Biden puso a cargo de los asuntos fronterizos hace 18 meses, declaró a principios de esta semana que la frontera estaba “segura”. “La frontera es segura, pero también tenemos un sistema de inmigración defectuoso, en particular, durante los últimos cuatro años antes de que llegáramos, y debe arreglarse”, dijo Harris. El número de arrestos de inmigrantes casi se ha duplicado bajo la administración de Biden y ya superó el récord del año pasado, según los últimos datos de Aduanas y Protección Fronteriza. En lo que va del año la Patrulla Fronteriza ha informado más de 1,94 millones de encuentros en la frontera, lo que supera los 1,73 millones de encuentros en todo 2021 y poco más de 458.000 en 2020.