El ex titular de la entonces PGR fue vinculado a proceso por delitos relacionados con la investigación del caso Ayotzinapa.
Después de celebrarse una audiencia en el Reclusorio Norte, Jesús Murillo Karam, exprocurador general de la República, fue vinculado a proceso por el Caso Ayotzinapa. Se le vincula a proceso por los tres delitos: contra la Administración de Justicia; Tortura; Desaparición Forzada (reclasificado con base en el Código Penal Federal). Después de las 09:00 horas inició la audiencia en la que se determinó la vinculación a proceso por los delitos de desaparición forzada, tortura y obstrucción de la justicia en el Caso Ayotzinapa.
Durante la audiencia, Murillo dijo que su llamada "verdad histórica" no había podido ser refutada. "Se pudieron cometer fallas, pudo hacerse mejor, puedo aceptar algunos errores, pudo haber fallas, y aceptar cosas que se hicieron mal, pero ninguno la ha podido tirar", dijo. En estos momentos, se discute si el juez ratifica la medida cautelar de prisión preventiva justificada, para que permanezca en el Reclusorio Norte.
"Verdad histórica". Murillo Karam es señalado por la Fiscalía General de la República (FGR) de fabricar la llamada "verdad histórica", que señala que los 43 normalistas fueron secuestrados, asesinados y quemados en el basurero de Cocula. Fue detenido el viernes pasado fuera de su casa en las Lomas de Chapultepec. Posteriormente ganó un amparo contra la incomunicación y a favor del cuidado de su salud. En la primera audiencia, el representante de la FGR señaló que Murillo Karam organizó reuniones con altos funcionarios para fraguar la llamada “verdad histórica” del caso Ayotzinapa en la que se asegura que los 43 normalistas fueron asesinados, sus restos quemados en el basurero de Cocula y arrojados en el río San Juan en septiembre de 2014.
Crimen de Estado. Un día antes de ser detenido Murillo Karam, el subsecretario Alejandro Encinas dio a conocer el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa en el que se concluye que la desaparición de los 43 normalistas constituyó un crimen de Estado en el que participaron integrantes del grupo delictivo Guerreros Unidos, así como diversas instituciones del Estado mexicano.
Se ocultó la verdad. Además de que autoridades federales, estatales y municipales fueron omisas ya que tenían conocimiento de la movilización de los estudiantes desde su salida de la normal Isidro Burgos hasta su desaparición y ello permitió su ejecución, además de que se trató de ocultar la verdad con la fabricación de la llamada “verdad histórica”.
No hay indicios de vida. Encinas indicó que no hay indicios de que los estudiantes se encuentren con vida, ya que los testimonios y evidencias acreditan que fueron asesinados y desaparecidos. Tras el informe, la FGR informó que un juez libró 83 órdenes de aprehensión contra 20 mandos militares y personal de tropa del 27 y 41 batallones en Iguala; cinco autoridades administrativas y judiciales de Guerrero; 26 policías de Huitzuco, seis de Iguala y uno de Cocula; 11 policías estales y 14 miembros de Guerreros Unidos. El sábado 20 de agosto, durante la primera parte de la audiencia inicial en el centro de justicia penal con sede en el Reclusorio Norte, la Fiscalía General de la República presentó ante el juez Marco Antonio Fuerte Tapia las imputaciones en contra del exprocurador General de la República Jesús Murillo Káram por tortura, desaparición forzada.