Álvarez Lara aclaró que el uso de tenis debe ser exclusivo para las actividades físicas y no de uso diario.
El uso de calzado escolar incorrecto puede generar dolor, daño o hasta deformaciones en los pies o en la columna, al desencadenar posturas inadecuadas en niños y niñas, afirmó el doctor Jaime Álvarez Lara, jefe del departamento clínico en la Unidad Médica de Atención Ambulatoria (UMAA) No. 89 del IMSS Coahuila.
Llamó a los padres de familia a dedicar tiempo para buscar los zapatos que mejor funcionen para cada persona, sugirió que éstos sean de cuero (evitar los sintéticos) y con suela de vaqueta suave, ya que permiten una mayor adaptabilidad y respiración a los pies.
Asimismo, abundó que lo ideal es que sean de material semirrígido, con buena contención para el tobillo y pie; exactos en cuanto a la medida, para evitar que apriete y no tener riesgo de sufrir deformaciones, pero tampoco deben quedar flojos. Recomendó cuidar el espacio que va de los dedos a la punta del zapato, verificar que haya medio centímetro de diferencia, para que estén libres y puedan moverlos.
Precisó que los sintéticos elevan el riesgo de acumular bacterias y producir hongos, mientras que las suelas de goma no brindan el soporte adecuado.
Álvarez Lara aclaró que el uso de tenis debe ser exclusivo para las actividades físicas y no de uso diario, cuando menos hasta los siete años de edad.
Finalmente, agregó que los zapatos deben mantenerse limpios, procurar ventilarlos, no guardarlos en espacios oscuros y muchos menos húmedos para evitar la proliferación de hongos que también pueden afectar los pies.