Los escudos de armas se originaron en la Edad Media. Por eso no es de extrañar que en las ilustraciones de la época o en cualquier película que se ruede teniendo esa época como contexto nos topemos con caballeros montando sus corceles y luciendo su heráldica familiar. Con el tiempo, esta práctica fue cayendo en desuso y en la actualidad podría decirse que existen dos corrientes: una profesional que se interesa por la historia, el significado y el estudio de los blasones y otra más lúdica centrada en el negocio que supone la venta del escudo de armas de un apellido.
Los escudos de armas se originaron en la Edad Media. Por eso no es de extrañar que en las ilustraciones de la época o en cualquier película que se ruede teniendo esa época como contexto nos topemos con caballeros montando sus corceles y luciendo su heráldica familiar. Con el tiempo, esta práctica fue cayendo en desuso y en la actualidad podría decirse que existen dos corrientes: una profesional que se interesa por la historia, el significado y el estudio de los blasones y otra más lúdica centrada en el negocio que supone la venta del escudo de armas de un apellido.
Estamos hablando de una “disciplina que estudia los escudos de armas de una familia, dinastía, una institución o una localidad”.
Lo que cambia en la mayoría de los casos es el escudo o blasón, por ejemplo: la familia Sánchez es representada por un león azul, mientras que la familia Pérez por una cruz dorada sobre un fondo rojo y la familia García por un ave que parece ser una garza y varias equis que son conocidas como el símbolo de San Andrés.