El palista gallego había accedido a la final venciendo su serie pero con el tercer tiempo.
Redacción Deportes,.- El éxito de Carlos Arévalo con el K4 y un oro para la historia el sábado, lo extendió imponiéndose este domingo en la última jornada del Campeonato del Mundo de piragüismo sprint de Halifax (Canadá) en la final K1 200, con un gran inicio para la delegación española, que junto a la plata de María Corbera en C1 200, amplía a cinco el número de medallas.
Arévalo se proclamó campeón del mundo en una gran regata, dominador desde el inicio y venciendo el pulso al que era dominador de la prueba en las últimas competiciones, el húngaro Kolos Csizmadia, que acabó tercero.
El palista gallego había accedido a la final venciendo su serie pero con el tercer tiempo. Sin embargo protagonizó una final imponente, primero en todo el recorrido que completó con un tiempo de 36.43, por delante del sueco Petter Menning (36.71) y de Csizmadia (38.82).
"Ha sido una regata muy dura con viento en contra pero me he encontrado muy bien y estoy muy contento. Las sensaciones han sido muy buenas. Ganar el oro en el k4 y ahora del K1 es lo máximo. No puedo aspirar a más", manifestó.
En la prueba anterior, María Corbera había firmado la cuarta medalla para España, con la que mejora los trofeos conseguidos en el último Campeonato del Mundo disputado en Copenhague.
Tras ser cuarta en la Copa del Mundo de Racice, María firmó una gran final en Halifax (Canadá), en una prueba que inició bien, con el dominio de la china Lin Wenjun, que cedió ante el poderío de la estadounidense Nevin Harrison (49.87), campeona en 2019, y acabó cediendo en la pugna por la plata con María (50.54) por solamente una centésima.
Corbera, que el año pasado fue campeona del mundo en C2 200, reedita la plata lograda en los anteriores mundiales en esta misma prueba por Antía Jácome.