Jarrige espera que este movimiento en las redes sociales se convierta en una acción política
Grandes celebredidades del mundo ¿contaminando al viajar en sus jets privados?
Todo empezó cuando la compañía de marketing de sostenibilidad Yard acusara a famosos como Taylor Swift, Kylie Jenner y hasta grandes empresarios como Elon Musk y Bernard Arnault de realizar recurrentes viajes en sus jets provocando una importante huella de carbono.
Innumerables memes, fotos y videos humorísticos, circularon burlándose de Taylor Swift después de la publicación el viernes de un análisis de la agencia, que la clasificó como "la celebridad más contaminante del año", con 170 vuelos desde principios de año.
Pero no todo es completa responsabilidad de las celebridades.
Si bien el sector aéreo también es responsable de entre 2% y 3% de las emisiones mundiales de CO2, según un informe de Transport & Environment, publicado en mayo, los vuelos causan una huella de carbono por pasajero entre 5 y 14 veces superior a los vuelos comerciales y 50 veces superior al tren.
Por otra parte, la aviación privada está en pleno auge desde la pandemia, ya que sus clientes desean evitar la supresión de vuelos y los riesgos frente al Covid-19.
Celebridades responden
Algunas estrellas reaccionaron ante la presión en las redes sociales. La semana pasada, un portavoz de Taylor Swift dijo en la prensa que ella "presta regularmente su jet a otras personas". "Atribuirle la mayoría o todos estos vuelos es totalmente incorrecto", detalla.
Mientras que el rapero Drake, señalado por un vuelo de 14 minutos entre Toronto y Hamilton, respondió en Instagram que el avión había sido trasladado para estacionarlo en otro lugar. "Nadie estaba a bordo", afirmó.
"Peor aún si voló vacío", comenta Beatrice Jarrige, jefa de proyecto de la asociación Shift Project.
En Francia, un portavoz del grupo Bouygues asegura que el avión seguido por "I Fly Bernard", presentado como el de Martin Bouygues, pertenece al grupo y "es utilizado por varios colaboradores". Indica que las emisiones de CO2 del avión son compensadas por proyectos de reforestación, una solución criticada porque no reduce las emisiones de manera sustancial.
Otros multimillonarios franceses como Bernard Arnault, Jean Charles Decaux y Vincent Bolloré, también afectados por la cuenta Twitter, no quisieron comentar.
Jarrige espera que este movimiento en las redes sociales se convierta en una acción política.
"No se trata de prohibir totalmente los vuelos, pero es necesario que los más ricos hagan un esfuerzo de sobriedad", precisa, abogando por inversiones en el ferrocarril.
Para Todts, los propietarios de los jets deberían, como mínimo, exigir que funcionen con biocarburantes en lugar de con queroseno, ya que ello impulsaría a los fabricantes de aviones a desarrollar estas tecnologías.
En septiembre de 2021, el sector de la aviación de negocios consideró que estos combustibles sostenibles son "clave" para alcanzar el objetivo de neutralidad de carbono fijado para 2050.