Tras escuchar sus peticiones, el presidente López Obrador le dio un beso en la frente al niño
Gracias a su astucia y a su delgado cuerpo, Emmanuel Rosales de 8 años, burló la seguridad del gobierno estatal y federal y pudo llegar hasta el presidente Andrés Manuel López Obrador y entregarle una carta para exigir justicia en el caso de su papá Saúl Rosales Meléndez, presidente de comunidad de San Pedro Tlalcuapan, Chiautempan, Tlaxcala, quien está detenido acusado por linchamiento en abril pasado.
Dudando por algunos momentos el poder llegar hasta el Ejecutivo federal, el menor se armó de valor y se metió entre vallas metálicas instaladas en el Hospital General de Huamantla, y sin que fuera detenido, pudo llegar hasta el templete a entregarle la carta.
"Que saquen a mi papá de la cárcel porque es inocente", fue lo que le pidió de manera rápida y un poco nervioso el menor al Ejecutivo federal.
Tras escuchar sus peticiones, el presidente López Obrador le dio un beso en la frente al niño.
"¿Qué fue lo que te respondió el presidente?", se le preguntó al menor quien, después de su hazaña acudió con su familia y quienes portan pequeños carteles exigiendo justicia para Saúl Rosales.
"Me dijo que iba a salir", respondió entre lagrimas, pero abrazado por su abuela María de los Ángeles Meléndez.
Familiares de Saúl Rosales Meléndez confían que con esta carta entregada al presidente López Obrador sean escuchados y el caso sea revisado.
El pasado 14 de julio, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Tlaxcala (PGJE) aprehendió a Saúl Rosales Meléndez, presidente de comunidad de San Pedro Tlalcuapan, municipio de Chiautempan, por su probable corresponsabilidad en el linchamiento consumado de un hombre, ocurrido en abril pasado, durante el Viernes Santo de la Semana Santa.
La aprehensión de Rosales Meléndez estuvo a cargo de elementos de la Policía de Investigación justo cuando salía de una sesión de Cabildo en el Ayuntamiento de Chiautempan.
El pasado 15 de abril, de celebrar el Viernes Santo y la escenificación del Viacrucis de Jesús, los habitantes de la comunidad de San Pedro Tlalcuapan, municipio de Chiautempan, pasaron a ser los protagonistas de un linchamiento en el que un hombre murió golpeado y quemado vivo, después de que lo acusaron de haber intentado robar en una vivienda.