El lanzador Daniel Castaño fue golpeado en la frente por una línea de 104 mph que salió del bate de Donovan Solano en la primera entrada del juego que los Marlins de Miami ganaron el jueves por 7-6 a los Rojos de Cincinnati.
Cuando el zurdo de 27 años cayó sobre sus rodillas y se llevó la mano a la cabeza, el receptor Jacob Stallings, el piloto Don Mattingly y los preparaadores físicos se dirigieron al montículo para ver cómo se encontraba.
Castaño no pareció haber perdido la conciencia. Una puerta se abrió a la distancia y un carrito se aprestó a ingresar en el campo.
El lanzador se levantó unos 90 segundos después y abandonó el campo por su propio pie con una toalla alrededor de su cuello. Antes, el colombiano Solano fue hacia el lanzador, le puso la mano en el hombro y conversó con él.
Los Marlins dijeron que Castaño mostró síntomas de conmoción leve.