México se posicionó como el segundo receptor de remesas el año pasado.
A la fecha, el choque inflacionario que se enfrenta en México y Estados Unidos no ha impactado el monto promedio de las remesas que se envían a nuestro país, pero si se mantienen los altos niveles habrá una afectación en el ingreso disponible para mandar y las necesidades en las que se ocupan, estimó Pablo Porro, director de Western Union México, Centroamérica y el Caribe.
Estrategia. En la presentación de la alianza con Mercado Pago para digitalizar la recepción de remesas, el directivo explicó que, además de la inflación que se vive en ambos países, también se tiene que considerar en el monto que envían los migrantes la evolución del tipo de cambio entre el peso mexicano y dólar. “Todavía no se ha notado a nivel de la industria grandes cambios, pero es algo que seguimos monitoreando porque, eventualmente si se mantienen estos índices de inflación, obviamente que el ingreso disponible para enviar como las necesidades aquí van a ser diferentes y seguramente será algo que se ajuste hacia arriba o hacia abajo”, explicó. México se posicionó como el segundo receptor de remesas el año pasado, de acuerdo con un análisis del Banco Mundial, solo detrás de la India y desplazando a China. En 2021 se captó la cifra récord de 51 mil 593.9 millones de dólares, un aumento anual de 27.1 por ciento, el más alto desde 2003. Por este motivo es que Western Union buscó ofrecer el envío de remesas forma digital por medio de Mercado Pago.