Sampaoli quería una plantilla de más calidad y experiencia para afrontar con garantías la próxima Liga de Campeones.
París,.- Jorge Sampaoli se marchó este viernes del Olympique de Marsella debido a diferencias con la dirección por el refuerzo de la plantilla, un portazo que recuerda a la espantada de su ídolo, Marcelo Bielsa, que dejó el club en 2015 tras disputar solo un partido de liga.
Sampaoli y el Marsella anunciaron este viernes el pacto "de común acuerdo" para la marcha del técnico argentino, de 62 años, al que todavía le quedaba una temporada de contrato.
La decisión se zanjó en una reunión del entrenador con el presidente del club, el español Pablo Longoria, en la que se acordó la rescisión del contrato del técnico y su equipo.
Aunque ninguna de las dos partes quiso decirlo claramente, tampoco quisieron ocultar que el motivo de la ruptura fue la impaciencia del técnico con la política de fichajes del club, que Sampaoli quería más ambiciosa mientras que los gestores priman la estabilidad financiera.
"Mi ritmo y mis objetivos no son los mismos que los de los dirigentes", afirmó el entrenador en un comunicado, en el que recalcó que "no hay nada malo en pretender cosas diferentes. Lo importante es buscar la excelencia y querer lo mejor para el Marsella".
Longoria, en una comparecencia posterior, reconoció que ha habido "fricciones profesionales, no personales", con el ya extécnico marsellés "No ha sido fácil separarse de un buen entrenador y de una buena persona".
El directivo aseguró que Sampaoli ha tenido un respeto "enorme" por el club y explicó que "no se trata de falta de medios" financieros, pero afirmó que "un proyecto debe construirse sobre la estabilidad económica".
"No creo que haya una falta de ambición, es una cuestión de tiempos", recalcó.
Longoria avanzó que esperan tener firmado a un nuevo entrenador para el lunes, ya que tienen conversaciones avanzadas con el principal candidato, cuyo nombre no dijo.
Añadió que esta temporada tendrán más ingresos debido a que el club disputará la próxima Liga de Campeones, pero que para este mercado "hay que ser pacientes" porque "es un mercado estratégico".
Según la prensa francesa, Sampaoli quería una plantilla de más calidad y experiencia para afrontar con garantías la próxima Liga de Campeones.
Pero hasta ahora el Marsella solo ha incorporado al joven central Isaak Touré, un prometedor central de 19 años y 2,04 metros de altura procedente del Le Havre, de segunda división.
Además, el club ha perdido al defensa internacional francés William Saliba, que pasó una exitosa temporada cedido por el Arsenal inglés, pero que ha vuelto a la disciplina del club londinense a pesar del interés del jugador y del equipo francés en que se quedara.
Sampaoli llegó al Marsella en febrero de 2021 como refuerzo para la parte técnica tras el nombramiento del presidente Longoria por el propietario estadounidense del club, Franck McCourt.
Su marcha, aunque diferente, no deja de recordar a la partida drástica de su ídolo en el campo técnico, el también argentino Marcelo Bielsa, que dejó plantado al Marsella en agosto de 2015 cuanto solo se había disputado una jornada de liga.
Bielsa argumentó supuestos incumplimientos de la anterior propiedad sobre los términos de la prolongación de su contrato, pero el entonces presidente del equipo, Vincent Labrune, consideró que esos argumentos eran "un pretexto más que otra cosa".
Aún así, Bielsa es idolatrado por los apasionados aficionados de Marsella por el vuelco que dio al juego del equipo en la única temporada que ocupó el banquillo.
Su discípulo Sampaoli también ha dejado un buen sabor de boca en la grada del Velódromo, no solo por su la evolución del equipo (quinto en liga la pasada temporada y segundo en la recién terminada) sino por también por su visceral temperamento, muy del gusto de los ardientes hinchas marselleses.