Albares y Blinken participan junto a los demás ministros de Exteriores de la cumbre en una cena en la que se abordará el "flanco sur".
Madrid,.- El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha subrayado este miércoles que el gran reto de la OTAN es que sus miembros se mantengan “unidos y coherentes” frente a los desafíos, porque si se dejan llevar por las diferencias “incluso los retos más pequeños pueden resultar insuperables”.
Albares ha coincidido así con el secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, quien ha apuntado que “el verdadero valor de lo logrado” en la cumbre de la OTAN ha sido “reafirmar como nunca la solidaridad” entre los países.
“La OTAN sale de esta cumbre más unida, más enfocada y con más herramientas para lidiar con las amenazas y desafíos”, ha dicho.
Albares y Blinken han intervenido juntos en un encuentro sobre “La OTAN después de Madrid” en el foro organizado por el Real Instituto Elcano y otras instituciones con motivo de la cumbre de la Alianza Atlántica.
Albares ha señalado que las amenazas y retos “van a existir siempre y se van a ir transformando”, por lo que la unidad y coherencia de los miembros de la Alianza es fundamental.
“Si lo hacemos en relación con Rusia, siempre podremos superar lo que venga, pero si empezamos a dividirnos y tratar las cosas de manera diferente, incluso los retos más pequeños pueden resultar insuperables”, ha dicho.
Preguntados por los flujos migratorios y las muertes recientes de inmigrantes irregulares en Melilla y en Texas, ha afirmado que “son tragedias abrumadoras y demuestran la complejidad del fenómeno de la inmigración” y la necesidad de “cooperar de la manera más estrecha posible”.
Así ha destacado la importancia de abordar este fenómeno de manera conjunta en los países de origen, tránsito y destino, y ha considerado que en el caso de que “alguien pueda utilizar esto como arma contra nuestra integridad territorial o soberanía la OTAN podría abordar esta urgencia”.
De hecho, en un encuentro con la prensa posterior, Albares ha precisado que la decisión de incluir la utilización de los flujos migratorios como unos los de los desafíos en el Concepto Estratégicos de la OTAN ha contado con el apoyo de los países del flanco sur, incluido Turquía.
Así, todos los miembros comprendieron que es una "amenaza que afecta a todos" y que "no se trata de que se vea de manera ofensiva hacia nadie, es defensiva para dar respuesta a amenazas".
Albares y Blinken participan junto a los demás ministros de Exteriores de la cumbre en una cena en la que se abordará el "flanco sur" de la OTAN y a la que están también invitados los representantes de Jordania y Mauritania.
“Los aliados tenemos claro cuáles son las amenazas del flanco sur, pero también tenemos claro que tenemos dialogar con nuestros socios del sur, porque muchos de nuestros desafíos son también sus desafíos: el terrorismo, la inmigración irregular, todo eso son también presiones para esos países”, ha señalado.