"Lejos de casa" ya se estrenó en festivales de Alemania e Italia, esperando pueda tener salir en pantalla grande nacional.
GUADALAJARA.- Sobre un fondo negro que sirve de respiro a 80 minutos llenos de vidas infantiles detenidas en un refugio, se lee en menos de cinco segundos: "al año, 19 mil menores de edad solicitan asilo a EU. La gran mayoría espera su destino en las ciudades fronterizas de México".
El problema, entonces, es que cada día hay 52 niños de distintos países llenando esos espacios; es decir, más de uno cada media hora.
Y están por la violencia que viven en su lugar de origen o para seguir a sus familias; les gusta el futbol, quieren ser matemáticos y progresar, dicen.
A todos ellos los conoció el cineasta Carlos Hernández, quien con cámara en mano siguió a dos decenas de pequeños que esperan, solos, que las autoridades les avisen si su solicitud es aceptada o no.
Así salió "Lejos de casa", documental que compite en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, que concluye este fin de semana tras diez días de actividades.
"Lo importante aquí era dar poco contexto, sino ver la cantidad de casos y variantes que existen en la historia de estos niños de diversos orígenes", dice el realizador.
"Filmamos durante mes y medio, pero dos semanas antes convivimos día a día, yendo a jugar a los carritos, basquetbol, a comprar las cocas o cortarse el cabello", agrega.
Visitante frecuente de la frontera, porque es algo que le atrae, Hernández se dio cuenta que las cosas habían cambiado con las nuevas políticas estadounidenses
Notó que comenzaron a llegar caravanas centroamericanas a llenar los albergues, no solamente de hombres adultos, sino de niños, familias, en busca de seguridad del otro lado del Río Bravo.
"Me llama la atención que no sólo son niños desplazados, sino que son personajes que tienen sueños, ideas, objetivos muy claros, reivindicando la figura de víctima. Son chicos que se deben quedar en este limbo, tres, cinco, seis meses, en el que sí deben tener mucha paciencia y por tanto forjar amistades, por eso son las despedidas son tan nostálgicas, pues conviven 24 horas los siete días a la semana", detalla.
Para seguirlos, Hernández optó por poner la cámara y observar los momentos claves, al tiempo que les pedía ignorar el instrumento.
"Que no nos vieran y actuaran como siempre", detalla.
"Lejos de casa" ya se estrenó en festivales de Alemania e Italia, esperando pueda tener salir en pantalla grande nacional.