Spears a sus 40 años, beber un sorbo de alcohol la pone mal y lamentó no poderse divertir como el resto de la gente.
CIUDAD DE MÉXICO.- Aunque ya es una mujer felizmente casada, todo parece indicar que la paz y la tranquilidad están todavía muy lejos de llegar a la vida de Britney Spears; a pesar de que la cantante llegó al altar hace tan sólo unos días, esto no evitó que volviera despotricar en contra de su familia, en especial de su hermano Bryan Spears.
A través de su cuenta de Instagram la intérprete de "Toxic" escribió un extenso mensaje para explicar las razones que la orillaron a dejar de fuera a toda su familia de uno de los días más felices de su vida.
Britney, inició contando que no pudo disfrutar de la bebida durante la recepción, ya que durante muchos años su padre, quien estuvo a cargo de su tutela legal hasta hace apenas unos meses, y su hermano le prohibieron consumir alcohol; incluso, la sometían regularmente a exámenes para detectar cualquier tipo de sustancia en su organismo."Los 13 años que estuve bajo el tutelaje, me hacían examen anti-drogas tres veces a la semana; y en realidad no me gusta el alcohol. Mientras tanto, escuchaba que mi papá se iba a los bares todas las noches y que mi hermano se comía su ensalada de camarones con un whisky con coca todas las noches en Las Vegas, después de mi show ¡y a veces antes! Y él nunca me dejaba ni siquiera beber un sorbo", recordó.
Además, llamó a Bryan "perro guardián" y se burló de la entrevista que éste ofreció a un medio digital, en la que aseguró que jamás tuvieron una mala intención hacia Britney, pero que si insistían en continuar con el tutelaje era porque la "Princesa del pop" no podía hacerse cargo ni de hacer reservaciones para comer."Ninguno de ustedes quería que terminara (el tutelaje), porque todos amaban decirme lo que tenía que hacer y tratarme como si fuera nada. No fuiste invitado a mi boda. ¿Verdaderamente crees que quería a mi hermano ahí, el que me dijo que no podía tomar un whisky con coca durante cuatro años?", agregó.
Por último, Spears reconoció que ahora, a sus 40 años, beber un sorbo de alcohol la pone mal y lamentó no poderse divertir como el resto de la gente.