La mujer gozó de protección por parte de los oficiales.
Dos niños y su padre fueron arrollados por una imprudente conductora que ignoró un señalamiento gráfico de alto en la colonia Cañada, quien en todo momento fue protegida por elementos de Control de Accidentes, para evitar que se hiciera público el accidente que protagonizó debido a su alto puesto laboral en KFC.
Los afectados fueron Ricardo Apolinar de 31 años de edad y sus dos hijos de nombre Jordán de 9 años y Mikel de 11 años, quienes terminaron en la sala de urgencias de la clínica 7 del Seguro Social. El accidente se registró en el cruce de las calles José R. Romero y Mauricio Magdaleno de la colonia Cañada y como responsable fue señalada una mujer empleada de Kentucky Fried Chicken (KFC), quien conducía un auto Mazda, color gris. De acuerdo a lo informado por familiares de los afectados Ricardo acababa de recoger a sus dos hijos de la escuela y se desplazaban a su domicilio a bordo de una motoneta color roja con negro, pero en citado cruce la conductora no hizo alto y los arrolló. Al sitio llegaron elementos de Control de Accidentes, quienes se presumió que tras recibir dádivas de la conductora, trataron de ocultar el choque a los medios de comunicación, pese a que había personas lesionadas. Incluso cuando la mujer fue turnada ante el Ministerio Público, los oficiales de Control de Accidentes sacaron de las instalaciones de Seguridad Pública Municipal a la mujer oculta y por otra entrada, para no exhibirla.