Es una enfermedad parecida a la varicela, pues ambos virus son de la misma familia.
Pese a que hasta el momento en México no se han identificado casos de viruela símica, la Secretaría de Salud (Sesa) del estado de Querétaro emitió un aviso epidemiológico por esta enfermedad.
Esta medida, explica, se realiza por indicación de la Secretaría de Salud Federal (Ssa).
Este aviso epidemiológico, detalló la dependencia en un comunicado, tiene el propósito de que todas las unidades médicas de primero, segundo y tercer nivel de atención reporten los casos sospechosos que se identifiquen como viruela símica, conocida también como viruela del mono.
La Sesa dijo que hasta el momento no se ha identificado como una enfermedad de transmisión sexual y no existe tratamiento específico.
Este padecimiento, agregó, cursa con dos periodos clínicos que, de forma general, se quitan sin complicaciones entre dos y cuatro semanas después de iniciar los síntomas.
La primera fase que se desarrolla en los primeros cinco días se caracteriza por fiebre, dolor de cabeza intenso, ganglios inflamados, dolor de la espalda baja, dolores musculares y falta de ganas de moverse o hacer alguna actividad física.
La segunda fase es la de aparición de pequeñas ampollas, que inicia los días uno y tres después del inicio de la fiebre; en ese momento aparecen las distintas fases del sarpullido que, por lo general, afecta primero la cara y posteriormente se extiende al resto del cuerpo.
El sarpullido inicia con máculas (manchas de color diferente) y evoluciona asincrónicamente a vesículas, pústulas (lesiones con pus y llagas) y costras. Es una enfermedad parecida a la varicela, pues ambos virus son de la misma familia.
El diagnóstico se realiza por reacción de la polimerasa en cadena (PCR), en muestras de exudado húmedo o seco de las lesiones cutáneas, preferentemente el líquido de las vesículas o pústulas; alternativamente, las costras.
Como medida preventiva, la Secretaría de Salud recomienda a la población en general lavarse las manos de forma frecuente, con agua y jabón o solución alcohol gel; cubrir nariz y boca con la parte interna del codo al estornudar o toser; y evitar compartir alimentos, bebidas, cubiertos y platos.