Fernández propuso buscar acuerdos primero en temas en los que hubiera posiciones más próximas como la tecnología y la cultura.
Berlín,.- El presidente argentino, Alberto Fernández, excluyó este miércoles en Berlín posibles sanciones argentinas a Rusia, debido a la escasa relación entre los dos países, y, junto con el canciller alemán Olaf Scholz, instó a parar la guerra.
"Deploramos la guerra. Pensé que la pandemia iba a cambiar al mundo y que los líderes del mundo se iban a dar cuenta de la desigualdad. Jamás pensé en que una guerra se desate después de la pandemia", aseguró.
Interrogado acerca de si Argentina se planteaba también imponer sanciones contra Rusia Fernández dijo que las relaciones económicas entre los dos países son mínimas y por lo tanto el tema de las sanciones no se plantea.
"Sin embargo, las sanciones contra Rusia tienen repercusiones negativas para todo el mundo y también para Argentina", agregó.
Asímismo Fernández descartó la posibilidad de que Argentina enviase armas a Ucrania y dijo que la prioridad es "que el mundo se siente a resolver el problema cuanto antes",
Los dos políticos resaltaron que la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania es algo que afecta a todo el mundo y que hay que buscar caminos para terminarla.
"Hemos hablado de las relaciones entre nuestros países y también de la situación mundial, en especial de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania", dijo Scholz en una comparecencia conjunta ante la prensa..
"El presidente Fernández y yo estamos de acuerdo en que hay que trabajar para detener esta guerra", agregó.
Fernández, por su parte, subrayó que la guerra en Ucrania "no es solo un conflicto entre Rusia y la OTAN o entre Rusia y Ucrania sino algo que afecta a todo el mundo".
Los dos políticos se refirieron a como la guerra ha afectado a la gente en todo el mundo con cuestiones como el aumento de los precios de la energía y los alimentos
Scholz agradeció la postura clara de Argentina ante la guerra en la asamblea de la ONU y dijo que era claro que Argentina está del lado de las víctimas.
Aunque el encuentro estuvo marcado por la guerra también se abordaron otros retos globales y bilaterales, entre ellos las relaciones entre la UE y Mercosur.
El acuerdo de Argentina con el FMI para un nuevo programa también tuvo un papel en las conversaciones entre los dos políticos
El canciller alemán, por otra parte, celebró que Argentina haya llegado a un acuerdo sobre un programa con el FMI.
A ese respecto, Fernández señaló que el acuerdo con el FMI ha hecho posible abordar otros temas y dijo que esperaba poder disipar pronto las dudas que existen en el llamado club de París.
"Quiero resolver las dudas del club de París lo más pronto posible. Todos los acreedores serán tratados igual que los acreedores argentinos", dijo.
En lo referente a las relaciones bilaterales tanto Scholz como Fernández resaltaron las posibilidades de cooperación que hay en materia energética.
"Estamos de acuerdo en que tenemos grandes posibilidades de cooperación en el tema energético. Argentina tiene un potencial gigante en energías renovables", dijo Scholz.
Fernández resaltó además las posibilidades de Argentina como suministrador de gas líquido y también en el desarrollo de hidrogeno verde.
Con respecto a las relaciones entre la UE y Mercosur los dos políticos coincidieron en la necesidad de relanzar las negociaciones.
Mientras que Scholz resaltó la importancia de fijar estándares en temas como el medioambiente Fernández señaló como principal dificultad la tendencia al proteccionismo "de algunos actores en la UE".
Ante ello, Fernández propuso buscar acuerdos primero en temas en los que hubiera posiciones más próximas como la tecnología y la cultura.
Fernández, por otra parte, reiteró el deseo de Argentina de acercarse a los Bric, donde está Brasil que es su principal socio comercial, y dijo que se debía evitar un nuevo orden bipolar que sería lo peor que podría pasar.
A ese respecto, Scholz dijo que el creía que el mundo del futuro sería multipolar donde "naturalmente" países como China y EU tendrían un papel importante pero en el que también habrá otros actores como la UE y diversos países en Asia, África y Latinoamérica..