Se fueron grandes nombres en la primera ronda, pero todavía resta talento de sobra al alcance de los equipos para el comienzo de la segunda ronda de selecciones.
Se fueron los primeros 32 turnos del Draft 2020 de la NFL, y no cabe duda que serán los más recordados a futuro. Las imágenes de las llegadas de los prospectos al evento, las reacciones en el escenario al escuchar sus nombres desde el podio, son experiencias que se quedan en nuestra memoria por largo tiempo.
No obstante, eso de ninguna manera significa que los jugadores más trascendentes de la actual camada de prospectos serán los elegidos en el primer día de selecciones. Todo lo contrario. Hay talento de sobra disponible para los equipos antes del arranque de la primera ronda, con varios nombres que parecían estar en camino a convertirse en reclutas de primera vuelta que, por una causa u otra, no fueron seleccionados el jueves por la noche.
No es común que se pueda hablar del mejor jugador en un grupo posicional todavía disponible para la segunda ronda. Eso puede decirse este año, con certeza absoluta, de la posición de corredor y de ala cerrada, que no tuvieron representantes entre los primeros 32 elegidos. También, se puede debatir con cierta confianza en torno a si el mejor linebacker interno y el mejor quarterback de la presente camada, siguen sin conocer sus destinos de NFL.
Andrew Booth Jr., esquinero, Clemson
Cuatro esquineros fueron seleccionados entre los primeros dos turnos, pero la realidad es que después de los dos prospectos mejor calificados --Derek Stingley Jr. y Ahmad Gardner--, había una distancia significativa con los del siguiente estrato, un grupo más nutrido, que incluyía a Kaiir Elam y Trent McDuffie, quienes sí fueron seleccionados en la primera vuelta, y Booth, con Kyler Gordon de Washington como otra posibilidad. Booth es un back defensivo esquemáticamente versátil que no teme defender contra la carrera. Posee tamaño adecuado y buenos instintos a la hora de atacar el ovoide.
Nakobe Dean, linebacker, Georgia
Quizás, el mejor jugador de toda nuestra lista, es probable que una falta de tamaño ideal en la posición de linebacker interno haya perjudicado los bonos de draft de Dean. Cinco defensivos de Georgia escucharon sus nombres entre los primeros 32 turnos, y Dean, quien posiblemente fue el corazón de la defensiva de campeonato el año pasado para los Bulldogs, se quedó esperando. No esperamos ver que Dean se quede esperando mucho más tiempo para conocer su destino de la NFL, a partir de que arranque la primera vuelta.
Arnold Ebiketie, a la defensiva, Penn State
Si hay algo que estaba claro desde los días previos al draft, es que los equipos en busca de cazadores de quarterbacks iban a tener una oferta variada y numerosa para elegir. Ebiketie fue uno de los prospectos que terminó sufriendo la sobrepoblación de talento entre prospectos de primera línea, incluso en una posición en la que nunca sobra el talento en las plantillas de NFL. Ebiketie no tiene el cuerpo largo que codician los visores, como Kayvon Thibodeaux, pero tampoco carece de un tamaño funcional jugar para la posición.
Breece Hall, corredor, Iowa State
El mejor corredor disponible este año todavía no sabe dónde jugará como profesional. Hall es el prospecto más versátil en la posición, y pinta para convertirse en un sólido corredor de tres intentos. Aunque había esperanzas para él de irse en la recta final del primer día, se quedó esperando. Después de las primeras cuatro o cinco selecciones de la segunda vuelta, hay un número de equipos a los que les vendría bien un corredor primordial o, al menos, un complemento para su backfield. Hall no tendrá que esperar mucho más.
Boye Mafe, linebacker, Minnesota
Como en el caso de otro defensivo de la Big Ten, Ebiketie, arriba, a Mafe le pudo haber perjudicado un poco el número vasto de especialistas en cazar quarterbacks disponibles en la parte alta de este draft. No posee la fuerza bruta de algunos de los otros prospectos que fueron elegidos arriba, y depende más de su velocidad, pero todavía se trata de un elemento que puede contribuir como novato, particularmente si encuentra un esquema que le ayude a aislarse en el perímetro.
David Ojabo, linebacker, Michigan
Básicamente, es un caso similar al de Mafe. Se desempeñan en la misma posición, y ambos apuestan a la velocidad más que a la fuerza o a la técnica interior para destrabar bloqueos y hacer jugadas. De la misma manera, un esquema defensivo que lo proteja de tackles masivos le vendrá bien al siguiente nivel.
George Pickens, receptor abierto, Georgia
Más que un caso de talento, el caso de Pickens tiene que ver más con preocupaciones respecto a su madurez, y esas con la clase de banderas rojas que pueden hacer caer a un prospecto dramáticamente. Nadie quiere lidiar con casos innecesariamente complicados, y la situación actual de Kadarius Toney con los Giants puede servir de ejemplo. Hay gran talento aquí, pero no todos están seguros de que exista la disposición adecuada para hacer que funcione.
Kenneth Walker III, corredor, Michigan State
Walker es un corredor diferente a Hall. Aunque pesan prácticamente lo mismo, Walker es un poco más bajo, y posiblemente menos elusivo, aunque no hay duda de que corre duro y con explosividad. No existe la misma certeza de que puede ser un corredor de tres intentos al siguiente nivel, pero comenzar su carrera como parte de un backfield por comité parece ser el camino que deberá recorrer Walker en la NFL.
Christian Watson, receptor abierto, North Dakota State
Un receptor abierto largo con velocidad recta y un amplio radio de atrapada, Watson puede contribuir para un equipo que busque sumar una amenaza profunda capaz de pelear balones disputados. La mayor parte de su trabajo podría llegar por el exterior, y quizás no contribuya tanto en rutas interiores, pero le servirá a equipos que buscan opciones para alejar a los safeties de la línea de golpeo.
Malik Willis, quarterback, Liberty
Para más de un analista de draft, Willis es el mejor prospecto en la posición de quarterback disponible este año. Yo estoy de acuerdo. Como pasador, tiene la capacidad de conectar en los diferentes niveles del campo, mostrando mejor toque de lo esperado en los pases largos. Su visión de campo es buena, y no le teme al bolsillo de protección. Todo eso, sin ni siquiera hablar de sus habilidades extraordinarias corriendo el ovoide, lo que aporta una faceta adicional al ataque. Sí, está menos refinado que Pickett, pero también posee un techo mayor.