‘Justicia para Damaris’, la tendencia que exige la pena de muerte para el ‘Monstruo de Chiclayo’

Varios colectivos se manifestaron contra Juan Antonio Enríquez García, quien secuestró, torturó y violó a la niña de 3 años.

“Los niños no se tocan, los niños se respetan. ¡Justicia para Damaris!”, se escuchaba en los exteriores de la Divincri de la Policía Nacional del Perú (PNP) de la ciudad de Chiclayo para exigir la pena de muerte a Juan Antonio Enríquez García, el ‘Monstruo de Chiclayo’, que secuestró, torturó y violó a la menor de tres años.

El miércoles 13 de abril fue capturado el agresor en una vivienda en construcción. Allí se halló a la menor dormida entre cartones en el suelo y atada de los pies. El sujeto fue llevado a la dependencia policial mientras que la niña fue trasladada al Hospital Las Mercedes para recibir las debidas atenciones.

En el celular del ‘Monstruo de Chiclayo’ se encontraron videos de connotación sexual en los que aparece Damaris, que sirvieron como pruebas en la investigación. Debido a esto, el Poder Judicial del distrito de José Leonardo Ortiz dictó nueve meses de prisión preventiva, acusado por los delitos de violación sexual y secuestro en agravio de una pequeña de solo tres años.

En la mañana del jueves, en los exteriores del organismo autónomo, se reunieron decenas de manifestantes para exigir justicia y la pena de muerte contra Enríquez García, lo cual también se viralizó en las redes sociales.

Las protestas han sido masivas: han quemado la casa del ‘Monstruo de Chiclayo’ donde la pequeña Damaris estuvo secuestrada y se espera que caiga todo el peso de la ley contra el violador.

“Pido su apoyo, que no dejen que se hombre salga (sea liberado). Ese hombre no ha tenido piedad”, dijo la tía de la menor a RPP Noticias.

JUSTICIA PARA DAMARIS

En las últimas horas, #JusticiaParaDamaris se volvió tendencia en las redes sociales, muchas voces exigían la pena de muerte para el ‘Monstruo de Chiclayo’, que ha movido a una ciudad y ha indignado al Perú.

“Cada día somos testigos de la situación álgida de violencia y peligro a la que están expuestas las niñas y adolescentes en nuestro país. Exigimos cadena perpetua para los violadores y abusadores, sin opción a apelaciones y sin beneficios”, escribió Familias Unidas por la Justicia, un colectivo de familiares de víctimas de feminicidio en busca de acceso a la justicia y reparación civil, según la descripción en su cuenta de Twitter.

Por su parte, Ni una menos Lambayeque pidió que se deje de difundir videos e imágenes de la pequeña Damaris para no revictimizar a la menor y exigió que eliminen tales publicaciones de las redes sociales.

Universitario Feminista convocó a una marcha en la Plaza San Martín y en la Plaza de Armas para pedir justicia por la menor. “La violencia que a diario sufren mujeres, disidencias e infancias no es más que la violencia que este sistema patriarcal ha legitimado, institucionalizado y normalizado a lo largo de la historia. La que hoy nos convoca a alzar nuestras voces, para juntxs luchar contra la violencia ejercida a una menor de 3 años. ¡Exigimos justicia y reparación para Damaris y todas las víctimas de violencia patriarcal!”, escribieron en la red de microblogging.

Las Army de BTS también alzaron su voz para exigir justicia contra el violador y pidieron más protección a las mujeres debido a los casos de violación y feminicidio que se ven a diario en el Perú.

“Me apena muchísimo la situación de la pequeña bebe que fue secuestrada y violada por un miserable. Una bebe de tres años paso por este abuso tan aberrante. ¡Justicia para Damaris! #JUSTICIAPARADAMARIS. Nadie merece pasar por estos actos, en Perú no existe nada para proteger a las mujeres, ni siquiera la leyes nos ‘protegen’. Miles de casos de violación y feminicidio todo los días, nadie hace nada”, manifestaron en la cuenta @lelebtslove, dedicada al grupo de K-pop y pusieron un video de las manifestaciones contra el ‘Monstruo de Chiclayo’.

ver en sitio completo: ‘Justicia para Damaris’, la tendencia que exige la pena de muerte para el ‘Monstruo de Chiclayo’