El comedor comunitario subsiste de los donativos económicos y en especie que entrega la población y los feligreses en la iglesia de Cristo Rey y en las oficinas Cáritas México.
CIUDAD DE MÉXICO.- Viudas y huérfanos que dejó la pandemia de Covid-19, personas que perdieron sus empleos, madres solteras, adultos mayores y migrantes acuden a la parroquia del Señor del Perdón, ubicada en la colonia el Sol, en Nezahualcóyotl para recibir alimentos en el comedor comunitario que abrió hace unos días la Diócesis de Nezahualcóyotl para apoyar a los grupos más vulnerables."Tenemos una alta incidencia de viudas con pequeños que rondan entre el año y los 16 años, es el que tiene mayor edad de los pequeños, tenemos un aproximado de 40 a 45 niños que básicamente son por los que más nos preocupamos, por la situación de la pandemia falta algún padre o fallecieron los dos padres y se están haciendo cargo de ellos los abuelos", dijo Mariana Rábago Mendoza, encargada del comedor comunitario.
En promedio, se entregan gratuitamente 120 raciones de comida al día a familias conformadas hasta por nueve personas.
"A mí me dan tres raciones de alimentos, a mi hermana le dan siete y de la otra son dos y pues sí es para ellos más que nada", contó Saralu Ávila, una de las vecinas de Nezahualcóyotl beneficiadas con el programa.
"Este comedor se puso precisamente en la colonia el Sol porque es paso de los migrantes y aquí cerca están las vías donde pasa la bestia y tenemos todo el corredor del Bordo de Xochiaca que es un lugar en situación de calle y un lugar de extrema pobreza", explicó Héctor Carabantes Piñón, sacerdote de la Diócesis de Nezahualcóyotl.
El comedor comunitario subsiste de los donativos económicos y en especie que entrega la población y los feligreses en la iglesia de Cristo Rey y en las oficinas Cáritas México, que se ubican en la avenida México, en la colonia Raúl Romero."Quisiéramos pedirle a la gente que nos apoyaran, que apoyaran al comedor porque la verdad las personas que hacen la comida se truenan los dedos porque no tienen y ellos nos dan lo que tienen y se les agradece, luego siento feo, pobrecitas", pidió Verónica Salazar, otra de las habitantes que acude por comida.
Para apoyar a las personas que sufrieron una pérdida de sus seres queridos durante la pandemia de Covid-19, se requieren donativos no perecederos, como arroz, frijol, así como perecederos, como carne, vegetales, fruta y todo lo necesario para preparar las raciones de los vecinos de escasos recursos.