La esposa e hijos de José llegaron al lugar y creyeron que éste se había desmayado.
En pleno día de su cumpleaños y cuando se dirigía a la iglesia a darle gracias a Dios por un año más de vida, un taxista falleció en su unidad de trabajo al sur de Saltillo.
Se trataba de José Bernal Sánchez, quien llegaba hoy a 52 años de edad, y el cual tenía su domicilio en la colonia Girasol.
El trabajador del volante había pasado una noche difícil a la que no le dio mayor importancia, pues de acuerdo a su esposa Carmen, se quejó de un fuerte dolor en el pecho, sin embargo, no fue a checarse.
Al mediodía el taxista salió de su casa en su auto de alquiler hacia un templo ubicado en la colonia Australia, pero solo llegaría hasta el cruce de la calzada Antonio Narro y bulevar Enrique Martínez y Martínez.
Al encontrarse a la espera de la luz verde del semáforo un infarto lo sorprendió por lo que la ver que no avanzaba los automovilistas comenzaron a pitarle.
Al verlo inconsciente solicitaron auxilio al 911 mientras que taxistas que se percataron de lo ocurrido dieron aviso a sus familiares.
La esposa e hijos de José llegaron al lugar y creyeron que éste se había desmayado, al ver que no latía su corazón la histeria se apoderó de ellos al bajarlo y colocarlo sobre el camellón.
La situación se tornó aún más tensa ya que los paramédicos de la Cruz Roja llegaron casi media hora después de que se solicitó el auxilio, además de que ya no pudieron hacer reaccionar al ruletero.
El área, en la que se congregaron decenas de curiosos, fue acordonada y una vez que Servicios Periciales y elementos de la Agencia de Investigación Criminal llevaron a cabo los trabajos de criminalística de campo correspondientes, el cuerpo fue retirado por trabajadores de una empresa funeraria.