El empate terminaba con la fiesta y determinaba que los celestes tuvieran que definir todo en la última fecha ante Chile.
Cuando se jugaban los descuentos del partido entre Uruguay y Perú se produjo una incidencia polémica. La pelota llovió al área de los celestes y sorprendió al golero celeste Sergio Rochet que debió dar unos pasos atrás para controlar el balón. Rochet tomó la pelota con ambas manos pero en el impulso quedó dentro del arco.
Uruguay ganaba 1 a 0 y estaba clasificando al Mundial. El empate terminaba con la fiesta y determinaba que los celestes tuvieran que definir todo en la última fecha ante Chile.
Los peruanos reclamaron gol y algunos jugadores, como el defensa Alexander Callens, llegaron a declarar: “Nos robaron, fue un robo”.