"Estoy completamente convencida de que Eric Zemmour es el mejor situado en esa elección".
París.- La fractura en la extrema derecha francesa se convirtió este domingo en una realidad sin retorno, con el apoyo de Marion Maréchal, la exdiputada y sobrina de Marine Le Pen, al otro candidato al Elíseo de la ultraderecha, Eric Zemmour, que preludia una lucha por ese espacio ideológico después de las elecciones.
Ante 8,000 personas que habían acudido a un mitin de Zemmour en Tolón (sureste), Maréchal entró en la campaña después de haber estado durante cinco años retirada de la política activa, y lo hizo con lo que muchos analistas consideran una puñalada a su tía.
"Estoy completamente convencida de que Eric Zemmour es el mejor situado en esa elección", señaló sin nombrar directamente a Le Pen, en quien todo el auditorio estaba pensando necesariamente en ese momento.
Explicó que esa convicción la tiene no por los sondeos, ya que Le Pen está por delante, sino por la dinámica que lleva Zemmour, que "en un tiempo récord" ha conseguido construir una "gran unión de la derecha" que atrae a personas de diferentes filiaciones y, sobre todo, que "barre el terrorismo intelectual de lo políticamente correcto".
El equipo de Zemmour quiso presentar la formalización del apoyo de Marion Maréchal como un punto de inflexión de la campaña y también como el retorno a la actividad política de una mujer que con solo 32 años tiene ya un capital de experiencia, como antigua diputada, y como heredera del clan que encarna desde hace más de medio siglo la ultraderecha en Francia, los Le Pen.